Rafal pone este fin de semana el broche de oro a sus fiestas patronales en honor a la Virgen del Rosario, patrona de la localidad, y los vecinos se han echado a la calle para participar en los últimos actos de un programa repleto de propuestas que comenzó a finales de septiembre. Ayer tuvo lugar el divertido desfile "de las casas baratas", que debe su nombre a un barrio del pueblo, y a su finalización la charanga de disfraces dejó paso a una "sardinada" que compartieron todos los presentes.

Desde el Ayuntamiento de Rafal señalan que "durante algo más de dos semanas la fiesta ocupa un lugar principal en la vida de los habitantes de este pueblo: Verbenas, elección de damas y reinas, pasacalles musicales, desfiles con carrozas y charangas, desfile de moros y cristianos, juegos y actividades para niños, alborada, carrera de cintas, pregón de fiestas,...". El propio alcalde, Manuel Pineda, ya manifestó su deseo de participar en todos los actos posibles.

Pero todo llega a su fin y hoy está previsto desde las nueve horas que se cocine una paella para que todos los rafaleños y los visitantes de poblaciones cercanas compartan el cierre de las fiestas.