La Semana Santa de Crevillent, declarada recientemente Fiesta de Interés Turístico Internacional, arrancó ayer de forma oficial con el pregón de la consellera de Cultura, Turismo y Deportes, Lola Johnson Sastre. La consellera empezó su discurso asegurando que "estar junto al pueblo de Crevillent en la semana más importante para los cristianos, porque celebramos los misterios centrales de nuestra fe, supone una gran responsabilidad, que voy a tratar de afrontar con ilusión, humildad y respeto a un pueblo que vive todo el año esperando este mágico momento".

Durante su intervención Lola Johnson destacó que "Crevillent se volcó con la celebración de su Semana Santa durante la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX y hoy, en pleno siglo XXI, los crevillentinos mostráis con orgullo todo cuanto envuelve a la celebración pasional: los actos cuaresmales, el Septenario de los Dolores, la gastronomía, las procesiones, las cofradías, los pasos, los coros, el Museo de la Semana Santa e incluso vuestra revista, que se edita desde 1925, os hacen únicos y, a la vez, os diferencian de otras semanas santas".

La consellera de Cultura, Turismo y Deporte destacó la Coronación Canónica de la Virgen de los Dolores, la celebración de las Jornadas Gastronómicas Cuaresmales y que este año es el primero que la Semana Santa crevillentina cuenta con la distinción de Fiesta de Interés Turístico Internacional. "Crevillent se une a Orihuela en este reconocimiento internacional de su semana más pasional, y se convierten, de este modo, en las dos únicas ciudades de la Comunidad Valenciana que tienen el honor de contar con este merecido reconocimiento", dijo Lola Johnson.

Sobre este reconocimiento, Johnson recordó que siendo la directora de la Televisión Valenciana recibió una llamada del alcalde de Crevillent para que el canal autonómico se hiciera eco de la visita de la Semana Santa a Nueva York para asistir al estreno de la ópera "Oh my son" del crevillentino Marcos Galvany, y que está inspirada en la Semana Santa crevillentina.

Lola Johnson también destacó que la Semana Santa crevillentina también es única gracias a las obras de Mariano Benlliure. "Las obras de Benlliure se caracterizan por su estilo natural, detallista y minucioso. El legado cultural que os ha dejado, con el paso inexpugnable de los años, se deteriora y, en este punto, se vuelve a producir una simbiosis perfecta entre la Semana Santa de Crevillent y la Conselleria de Cultura", apuntó la consellera para recordar que el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales ha restaurado más de 100 esculturas de Benlliure que forman parte del museo que se volverá a abrir, después de su remodelación, el próximo Miércoles Santo.

En su pregón, Lola Johnson repasó cada una de las procesiones de la localidad y finalizó expresando su deseo para que los crevillentinos sigan trabajando para su Semana Santa.

Tras el pregón, arrancó la primera procesión de la Semana Santa crevillentina. Desde el interior de Nuestra Señora de Belén salió la Hermandad de la Convocatoria, que con el sonido de sus "bocinas", y recorriendo algunas calles del casco antiguo de la localidad, convocó a los vecinos a participar en los diferentes actos de la Semana Santa.

La Semana Santa de Crevillent continúa hoy con la procesión de la Entrada de Jesús en Jerusalén, por la mañana, y el Concierto de Semana Santa, por la tarde, que ofrece el "Requiem en re menor" (KV 626) de W. A. Mozart.