Miles de vecinos de la Vega Baja disfrutaron ayer de un espectacular día primaveral de Lunes de Pascua para cumplir con la tradición y pasar el día en el campo o la playa, comer los platos típicos de la jornada como el conejo con tomate, disfrutar de la familia y amigos y degustar la mona con chocolate. Como ocurrió en el Domingo de Resurrección, cientos de familias se acercaron a Lo Albentosa, junto al parque natural de las lagunas de Torrevieja y La Mata. Ayer este espacio se vio desbordado por la llegada de vehículos que incluso llegaron a aparcar cercando el cementerio de La Mata y algunos bancales de viñedos. Otros tantos vecinos de Guardamar, Torrevieja y muchos procedentes de municipios del interior de la comarca prefirieron acudir a la pinada, en la que además del bosque de pinos y las dunas libres del paso de vehículos -el acceso está restringido- puede disfrutarse de la cercanía de la playa en la que más de uno estrenó la temporada de baños.

Los tiempos han cambiado y los destinos más populares han sido modificados por las casas de campo en la huerta para muchos de los vecinos de las zonas más pobladas, como Orihuela y Torrevieja, o en el caso de quienes todavía disfrutaban ayer de sus vacaciones llegados de otras comunidades disfrutar de la playa y el paseo urbano, como bien demostraba el aspecto de la playa del Cura en Torrevieja. Pero para otros se mantiene la tradición, como es el caso del campo de Benejúzar, la zona de San Cristóbal en el Raiguero de Bonanza de Orihuela, la pinada de La Pedrera de Bigastro o, incluso, los más osados, en la Cruz de la Muela. En muchas de estas zonas los juegos de mesa se alternaban con "angrunsaeras", balones y tiendas de campaña.