La asociación Movimiento Local Stop Desahucios de Torrevieja ha puesto a disposición de quienes lo necesiten un banco de alimentos al que cualquier persona puede acudir en busca de ayuda. Para optar a ella es necesario presentar un certificado del INEM que acredite si se está cobrando o no alguna prestación y una fotocopia del padrón y del DNI de las personas empadronadas en la misma casa, así como un justificante en caso de ser beneficiario de alguna otra asociación. A partir de ahí, se realiza un seguimiento para ver si la persona realmente lo necesita y, si es así, obtiene la ayuda.

Este fondo de alimentos se pidió en enero, explica el responsable de la asociación, Antonio Padilla, porque venía gente que no solo necesitaba asistencia con la hipoteca sino también ayuda para conseguir alimentos. "Desde la Concejalía de Bienestar Social nos mandaban afectados que además de tener problemas para pagar pasaban hambre, y nosotros se los remitíamos de nuevo a la Concejalía, que los enviaba a otras organizaciones pero a los 15 o 20 días los afectados volvían diciendo que no los había ayudado nadie". Por este motivo, Padilla decidió pedir a la Unión Europea la creación de un banco de alimentos independiente, y hace apenas tres semanas fue aprobada su solicitud.

Esta asociación se creó hace un año y medio como plataforma y se constituyó con carácter jurídico legal el pasado diciembre. Hace casi dos meses se instaló en la sede de la calle Padre Roda número 5, en un local cedido, a través del concejal de Bienestar Social, Tomás Ballester, por la asociación Gaex, que se trasladó a un inmueble más grande concedido por el Ayuntamiento y que todavía se hace cargo del alquiler, la luz y el agua de su antigua sede, hogar ahora de Stop Desahucios. Desde esta asociación, que integra también la plataforma Afectados por la Hipoteca, aseguran que intentan no llegar a la movilización para paralizar los desahucios, sino que intentan ayudar a los afectados antes mediante la negociación bancaria o a través de mecanismos como la refinanciación, la dación en pago o cualquier herramienta legal para aplazar el embargo. Si no queda tiempo para recurrir ante el juzgado o pedir un aplazamiento judicial, se moviliza a los componentes de la plataforma de afectados y Stop Desahucios y se intenta paralizar. Normalmente se consigue un aplazamiento de dos o tres meses, bien para que los vecinos salgan dignamente o para intentar conseguir algún tipo de acuerdo, como un alquiler social.

Financiación

"Ayudamos a personas que están en la exclusión social, no tienen alimentos, les están quitando la casa... no podemos cobrarles nada, lo hacemos sin ánimo de lucro", aseguran. Por ahora, la iniciativa se mantiene gracias a su sueldo de pintor y a la ayuda de su mujer, con lo que hacen frente a todos los gastos. Cuentan con el apoyo de la gente, que colabora aportando utensilios y mobiliario para acondicionar la sede, pero en ningún momento dinero. "Realmente tampoco lo queremos, aunque si viniera de algún organismo oficial lo cogeríamos porque tenemos que pagar los abogados, los procuradores,..", indica..