Con ocho años comenzó a tallar sus primeras esculturas, evolucionando con los años hasta conseguir el reconocimiento internacional de su trabajo. Ha expuesto en Buenos Aires, Sao Paulo, Miami o Nueva York. Tras más de 800 exposiciones mañana inaugura su exposición, la primera en Orihuela, en la sala San Juan de Dios.

Tras más de 800 exposiciones, ya tocaba en Orihuela...

Aquí no había expuesto nunca, he participado en los Murales de San Isidro en dos ocasiones pero nunca había traído mis obras. He adaptado la exposición a las características de la sala, por lo que se mostrarán 27 obras de tamaño pequeño y mediano, pues tengo punturas de hasta dos y tres metros que no cabrían. Ha habido que adaptarse a la arquitectura del edificio, pues hay zonas altas, bajas y desniveles ocasionados por las características del edificio, pero por otra parte se trata de una sala de dimensiones regulares, es más grande que una convencional y está muy bien situada.

Ana Mas, concejala de Cultura, ha definido su obra como un "expresionismo domesticado", ¿Cómo la definiría usted?

Yo no las calificaría de expresionismo, aunque mis primeras obras sí lo eran. Es difícil enmarcarlas en un estilo, ya que con los años he ido desarrollando uno propio. Me gusta representar las formas humanas y vegetales, en las que destacan la ausencia del color. Puedo representar una raíz de unos centímetros en dos metros. Algunos vienen a verla y piensan que es abstracto, pero nada más lejos de la realidad. Se representan al detalle formas vegetales y humanas. Además, muchos piensan que el arte abstracto es lo más moderno, pero es algo que ya se ha superado.

Sus obras se caracterizan por la ausencia de color, ¿Por qué ha apostado por la monocromía?

Es la técnica que mejor me permite comunicar. Al ser dibujo y no pintura, no hay color. El dibujo me permite una mayor representación gráfica del volumen. Domino todas las técnicas pero esta es la que ahora más me apetece.

¿Qué ventajas le aporta?

Todas las técnicas permiten comunicar. No se trata de que sea mejor o peor, sino diferente. Para mí, lo esencial es representar las formas, por eso también me dedico a la escultura. Lo más importante es crear un impacto, un sentimiento, en el espectador y no se quede indiferente.

¿Hay oportunidad para los jóvenes que empiezan ahora su carrera y quieran vivir del arte?

Bueno, la cosa ahora mismo está mal para todos, de eso no hay duda. Las oportunidades se han limitado en todos los ámbitos, no solo en el arte. Sin embargo, al final, todo depende del artista en sí, de lo que haga y lo que destaque. Como todo en la vida, si eres bueno, al final acabas consiguiéndolo, hay que formarse y experimentar.

Aquí, en Orihuela, está la Escuela de Arte Superior...

No conozco personalmente el trabajo que realizan, pero sí me parece muy bien que en la ciudad haya un lugar donde la gente joven pueda formarse, aprender y adentrarse en el mundo del arte para dar sus primeros pasos.