El jefe del Servicio de Relaciones Internacionales de la Universidad de Murcia (UMU), Matías Balibrea, se ha mostrado "atónito" tras conocerse la noticia del pederasta Daniel Galván Viña, que trabajó en la Universidad de Murcia de 1996 a 2002 y fue detenido ayer tarde en el Hotel Legazpi de la capital de Murcia y sin ofrecer resistencia, en virtud de una orden internacional de detención tras ser revocado el indulto que le concedió el rey de Marruecos, Mohamed VI.

Su función, ha explicado en declaraciones a Onda Regional recogidas por Europa Press, "era la relación que tenemos con los países del magreb del norte de África y todos los países árabes por su conocimiento de la lengua árabe".

Sabíamos que era de origen iraquí, ha afirmado, "pero más allá no tenía ni idea de si podía haber estado colaborando con el ejército iraquí o gobierno español como se ha llegado a decir", tampoco su procedimiento judicial en Marruecos, "lo desconocía por completo".

Parece ser que su domicilio lo tenía en Torrevieja (Alicante) "pero desconocía que podía vivir ahí y si pudiera haber estado viviendo en Murcia en régimen de alquiler o compartiendo piso", ha declarado.

Confiesa que reconoció a Daniel Galván por la foto y por el nombre, "evidentemente conozco a todos los que han estado colaborando con nosotros" aunque "en la foto está algo más cambiado, los rasgos son los mismos y el nombre, sin lugar a dudas".

La verdad, ha afirmado Balibrea, "es que me quedé bastante sorprendido, atónito y alucinado" con la noticia.

En concreto, Daniel Galván Viña trabajó para la Universidad de Murcia (UMU) en el departamento de Relaciones Internacionales, primero como becario desde 1996 a 1998 y, posteriormente, con un contrato desde 1998 a 2002, según confirmó ayer el rector de la institución docente, José Antonio Cobacho, quien señaló que, tras conocer la noticia, ha consultado la ficha del individuo y ha comprobado que, al parecer, es un hombre "con un gran conocimiento de idiomas, en concreto, del árabe", y la UMU es una universidad "con mucho interés en forjar relaciones con los países árabes".

En la ficha del individuo había también constancia de que el domicilio oficial en aquel momento en España era Torrevieja (Alicante), según Cobacho, quien no pudo añadir más información, ya que no tuvo la oportunidad de conocerle. "Han sido los compañeros del área de Relaciones Internacionales los que me han informado", afirmó.

Al parecer, según el rector, la labor de Galván Viña en la UMU "fue absolutamente normal, e hizo satisfactoriamente su trabajo". Prueba de ello, indicó Cobacho, es que este individuo "tuvo primero una beca durante dos años y luego un contrato laboral durante cuatro años". Cuando llegó el momento de convertirse en funcionario, el pedófilo "no siguió ese camino, en 2002".

Dado su conocimiento del árabe y de otros idiomas, Galván Viña "se ocupaba de asuntos de relaciones internacionales, aprovechando la importancia que tiene para la UMU esta área, puesto que cuenta con alumnos de muchas nacionalidades y es preciso hablar muchos idiomas".