La pedanía de la Murada arranca este fin de semana sus fiestas sin saber si tendrá subvención. Así lo aseguró ayer la portavoz socialista, Carolina Gracia, quien criticó la gestión de la edil de Festividades, Mariola Rocamora (PP), al tiempo que, en tono jocoso, invitaba a Mar Ezcurra, de Ciudadanos -partido que comparte con los populares la gobernabilidad de Orihuela- que, aunque esté en Cultura, se pase por Festividades a echar una mano.

La socialista dijo que las bases que deben regir la convocatoria no se han publicado por Festividades. «Ha sido incapaz de decirle a la comisión de fiestas (de La Murada) qué cantidad le corresponderá para las Fiestas de 2016», explicó Gracia, quien recordó que el pasado mandato se realizó un duro trabajo burocrático para que cada comisión se convirtiera en asociación para poder legalizar el pago de ayudas. «No hay ningún elemento objetivo ni se puede achacar a Intervención que no estén publicadas las bases. Este es un proceso que funciona con normalidad y lo normal era que a estar alturas las pedanías tuvieran la convocatoria y que esta fuese pública porque existe un presupuesto prorrogado».

El pasado año se destinó 302.000 euros para subvencionar las distintas fiestas en función de actos y vecinos. Las comisiones, que tienen otras fuentes de financiación, también necesitan saber hasta dónde les puede ayudar su ayuntamiento y más cuando, como es el caso de La Murada, las fiestas han comenzado. '

«Si no se garantiza a las comisiones (la ayuda) se genera inseguridad. Se verán con problemas a la hora de hacer las contrataciones y elaborar el programa de cada pedanía porque no saben con qué aportación van a contar». En 2015 las bases se publicaron en abril tras resolverse los problemas pero, según le contestó a Gracia la edil Rocamora en una pregunta que se le formuló en febrero en el pleno, este año no estarán hasta mayo o junio. «Cuando uno tiene claro lo que quiere hacer las cosas van saliendo. Si no tuviera presupuesto estaríamos hablando de otra cosa. Hay presupuesto pero no hay gestión ni hay voluntad, es una irresponsabilidad. Nos consta por tres comisiones que para verla (a Mariola Rocamora) hay que esperar demasiado y eso no puede ser».