El concejal Antonio Zapata ha anunciado hoy que el grupo municipal socialista de Orihuela ha alegado contra el plan parcial de Cala Mosca y contra el Pativel, en ambos casos con la firme intención de que "el último kilómetro de costa virgen no sea enterrada con cemento".

El edil socialista ha considerado que "hay silencios que matan y el silencio de Begoña Cuartero y Emilio Bascuñana matan cada día un poco más nuestro último kilómetro de costa virgen". De este modo Zapata ha recriminado que "nadie a día de hoy nos ha explicado porqué habiendo conseguido el gobierno de PSOE y Los Verdes que se tuviera que realizar un Estudio de Impacto Ambiental y además un informe técnico, que determinara que parte de Cala Mosca debía ser zona especialmente protegida. Finalmente se ha claudicado ante los intereses de una mercantil y no se ha peleado porque se convierta en un espacio medioambiental para el disfrute ciudadano".

Según el socialista, Cuartero y Bascuñana "han borrado de la historia la lucha de la sociedad civil por mantener un enclave privilegiado y enterrar bajo el cemento el trabajo que se había conseguido impulsando y publicando un plan parcial que no recoge las exigencias que el informe de un técnico de la Concejalía de Medio Ambiente, que solicité y se redactó en junio de 2014. En él había puesto negro sobre blanco que había zonas de especial protección".

Además el edil se ha preguntado el motivo de que en esta ocasión "no se ha solicitado nuevo informe a ese técnico, por qué ese técnico ya no tiene asignado ese expediente y por qué ya no aparece ese técnico nunca más en ese expediente".

El concejal asegura que ante la "grave irresponsabilidad" de este equipo de gobierno su grupo ha decidido hacer alegaciones a dos instrumentos que deben servir para proteger Cala Mosca.

El primero es el Plan de Acción Territorial para la Infraestructura Verde Litoral, el Pativel. "Como saben ese instrumento de la Generalitat pretende crear una infraestructura verde a lo largo de la costa de la comunidad. Este plan ha dejado fuera Cala Mosca, bajo el argumento de que estaba en parte urbanizada, sin embargo entendemos que como ventana al mar que es y como elemento que se encuentra en un enclave entre Sierra Escalona, las Salinas de Torrevieja, Cala Ferris, la LIC de Cabo Roig y además por tener fauna y flora protegida debe tener la máxima protección y por tanto delimitar el suelo donde no debe construirse hasta un total de dos mil metros desde la ribera del mar hacia adentro".

La segunda actuación ha explicado Zapata que "es alegar contra el plan parcial que está en exposición pública. La construcción que se va a hacer sobre el mismo augura la destrucción total de la zona protegida y del enclave".

"Por tanto qué mejor para alegar contra esa propuesta que las sentencias del Tribunal Supremo que es el máximo órgano judicial que interpreta nuestras leyes. Como el Ayuntamiento de Orihuela ha decidido renunciar a la potestad discrecional de dirigir planeamiento en base a ese informe técnico de junio de 2014, solicitamos que por la Dirección General de Evaluación Ambiental se proponga desclasificar y proteger como suelo no urbanizable la zona con especies protegidas y por tanto no se podrá construir nada allí".

Así pues "al tratarse de un suelo con especies protegidas debe ocurrir como el famoso plan en Ávila, de un conocido promotor de nuestra zona, en el que el Tribunal Supremo manifestó que las administraciones deben velar por el interés general materializado en zonas especialmente protegidas, como es este caso, obligando al urbanizador a reordenar el plan parcial excluyendo esas zonas protegidas".

Por último el Antonio Zapata ha dicho que "esperamos que Cuartero y Bascuñana como concejal de Urbanismo nos expliquen por qué han hecho dejación de funciones en un tema de vital importancia medioambiental para nuestra costa y nuestro municipio. Nosotros por responsabilidad hemos contribuido a que Cala Mosca siga siendo un enclave natural con la presentación de estas alegaciones".