Como manda la tradición, el nombrado Caballero Cubierto de la Semana Santa de Orihuela, ha ofrecido una recepción en el claustro de Santo Domingo. Federico Ros, abogado de profesión, ha estado acompañado por su familia en este día tan especial para él.

A las 17 horas se ha iniciado el saludo a los invitados y personas que han querido acercarse hasta el hoy colegio. Ros, junto al alcalde de la ciudad, Emilio Bascuñana, y la edil de Festividades, Mariola Rocamora, han saludado a todos aquellos que han hecho cola para entrar en el acto. A todos ellos, como regalo, el Caballero Cubierto les ha dado una un broche con la imagen del Cristo Yacente.

Al acto han asistido personalidades de todos los ámbitos, entre los que se encontraban el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues.

Federico Ros se ha dirigido a los presentes en un discurso cargado de emotividad, recordando a su abuelo quien también fue Caballero Cubierto en 1941, y a su familia de quien ha dicho le inculcaron valores "como la cultura del esfuerzo y la responsabilidad, por lo que pido perdón si en alguna ocasión no he demostrado que esos valores los llevo dentro".

Pero el momento más reivindicativo del discurso llegó después al referirse al mantenimiento de la Procesión del Entierro "como una tradición cívico-religiosa y la participación del gobierno municipal en la misma como hasta ahora". Se da la circunstancia de que Ros es el abogado que está defendiendo al Ayuntamiento de Orihuela en el contencioso que mantiene el Cabildo de la S.I. Catedral de Orihuela contra el consistorio por la titularidad de la imagen más representativa de la procesión de hoy, "La Insignia de la Cruz", de Nicolás de Bussy, conocida como "La Diablesa", uno de los conjuntos escultóricos más importantes de la Semana Santa oriolana. El letrado ha apelado a la unidad y a instado a una reunión entre las autoridades municipales y eclesiásticas. "El hecho religioso comprende al individuo y no debe la administración participar de ello, debe ser neutral; sin embargo, no significa que el Estado y el resto de las administraciones públicas deban dar la espalda a una realidad social que claramente forma parte de nuestra historia", ha señalado añadiendo que "la administración no debe verse privada de sus competencias sobre su patrimonio inmaterial porque así lo ha considerado la sociedad y máxima cuando se trata de uno de los símbolos de la cultura de la ciudad".

Ros también ha abogado por el impulso que supondría para la procesión de Sábado Santo su declaración como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, para lo que se han dado ya los primeros pasos.

Tras el discurso, a las 19.30 horas se ha iniciado la Procesión del Santo Entierro de Cristo desde la iglesia de las Santas Justa y Rufina encabezada por el Caballero Cubierto con su estandarte, y los pasos de San Juan Evangelista, "La Diablesa", el Cristo Yacente y La Soledad.