Con la invariable emoción de siempre, entre torrevejenses,"La Purísima", patrona de la ciudad, el Santísimo y la imagen de San Juan se han encontrado a primera hora de la mañana de hoy, entre aleluyas, en las "cuatro esquinas" del centro de Torrevieja. El anuncio era grande, la Resurrección de Jesús, y la costumbre manda en Torrevieja que cuando se le quita el velo negro a la Virgen, lluevan pétalos y aplausos, y las lágrimas de muchos confundan añoranzas con alegrías.

Es, con diferencia, la procesión más bonita, la más popular, la que más se espera, la que más emociona. Y lo es de fin y de principio, porque concluyen los cortejos religiosos que han contemplado miles de personas, protagonizados por catorce cofradías, pero se da inicio oficial a la primavera en casas de campo, pinadas y playas para disfrutar del mejor tiempo con la familia y los amigos. Viandas y monas de Pascua siempre se han preparado en Torrevieja después "del Encuentro".

También es la procesión que ha resistido al paso del tiempo sin apenas interrupciones, porque sale la Patrona, y eso siempre es cosa seria. Hubiera o no procesiones de Semana Santa organizadas por las calles de la ciudad, el pequeño trono de la Inmaculada nunca ha faltado a su cita del Domingo de Resurreción. Los desfiles actuales se remontan a principios de los ochenta.

Concepción

El cruce de las calles Concepción y Fotógrafos Darblade se convierte también todos los domingos de Pascua en un escenario para el reencuentro de muchos torrevejenses que apenas pueden verse, todos juntos en el mismo lugar, durante el resto del año. Porque es de esos actos que más allá del componente religioso se convierten en rito de convivencia. La alegría y la emoción se dan en unos pocos minutos, también ante la sorpresa de los visitantes, que mirando el reloj del móvil, van pensando en el regreso a la meseta.