El Ministerio de Hacienda ha puesto la lupa en 11 municipios de la Vega Baja por incumplir la Ley de pago a proveedores al abonar sus facturas más tarde de lo permitido por la normativa, que contempla un máximo de 30 días. Algunos de ellos lo vienen haciendo de forma reincidente durante los últimos dos años, aunque son tres los que destacan en la lista negra. Son Benijófar, Callosa de Segura y Albatera, que se demoran una media de 226, 194 y 162 días, respectivamente. Por ello podrían ser sancionados con multas económicas o aplicando retenciones a los tributos que reciben del Estado. En el polo opuesto se encuentran los Consistorios de Jacarilla, Dolores y Almoradí, que son los más eficientes en el pago de sus facturas.

El informe elaborado por el Ministerio de Hacienda con datos relativos al primer trimestre del año revela que fueron once los Ayuntamientos que incumplieron la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera. A los tres municipios anteriormente citados se unen los de Daya Vieja (122 días); Orihuela (117 días); Rafal (62 días); Torrevieja (53 días); San Miguel de Salinas (46 días); San Isidro (44 días); Granja de Rocamora (40 días); Pilar de la Horadada (36 días) y Bigastro (38 días).

Significativo

El caso de Benijófar, un municipio gobernado por Luis Rodríguez (PP), es especialmente significativo dado que nunca ha cumplido esta legislación y el periodo medio de pago es siete veces mayor de lo que debería. Entre enero y marzo de 2017, el Ayuntamiento afrontó facturas por valor de 199.801 euros mientras que las operaciones pendientes se duplican, con un total de 442.978 euros.

El segundo en la lista de morosos de Hacienda es Callosa de Segura, una localidad que tiene a Fran Maciá (PSOE) como alcalde. En este caso el Ayuntamiento afrontó pagos por 730.189 euros en el primer trimestre, quedando pendientes 1.028.674 euros en facturas en el cajón sin abonar. El tercer municipio con más problemas de liquidez para afrontar sus pagos pendientes es Albatera, con Rosario Ballester (UPyD) como alcaldesa. En esa localidad se pagaron 696.770 euros en los tres primeros meses del año, quedando pendientes de abonar otros 586.767 euros.

Plazos

La normativa estatal da a los Ayuntamientos un plazo de 30 días para dar el visto bueno a las facturas desde que entran por registro. Una vez que obtienen la conformidad, se inicia otro periodo de 30 días en el que obligatoriamente deben de abonarlas. Pues bien, los municipios que mejor pagan lo hacen durante ese primer periodo de un mes. En el caso de Jacarilla, Dolores y Almoradí, han sido capaces de pagar sus facturas desde que llegan al Consistorio en menos de 30 días, por lo que ni siquiera utilizan los 30 días adicionales que permite la legislación para afrontarlas. Son pues los pagadores más eficientes de la Vega Baja. De hecho, el primero de ellos, gobernado por la socialista Pilar Díaz, ha conseguido abonar durante la primera mitad de la legislatura todos los préstamos pendientes, por lo que en la actualidad no tiene ningún tipo de deuda con entidades bancarias.

Según el informe hecho público por el Ministerio de Hacienda, durante el primer trimestre del año los municipios de la Vega Baja que también cumplieron con sus obligaciones de la mencionada Ley fueron los de Algorfa; Formentera del Segura; Guardamar del Segura;Redován; Rojales; San Fulgencio; Los Montesinos; Catral; Daya Nueva y Benferri.