La concejala de Educación de Orihuela, Begoña Cuartero, compareció ayer para valorar el estado en el que se encuentra el muro que bordea el colegio de Los Dolses y dijo que «a pesar de las grietas, los informes técnicos de la Concejalía y Consellería aseguran que no supone ningún riesgo para los niños, pues no corre estructuralmente peligro de desprendimiento». Aún así anunció que «para mayor seguridad, se ha procedido al cierre del patio para los alumnos de infantil en el que se encuentra el muro» y dijo que se prevé su reapertura la próxima semana «con la instalación de vallas de protección para los menores».

Las declaraciones de Cuartero llegan después de que la oposición de Cambiemos Orihuela y el propio presidente de la Ampa, Txomin Angós, alertaran del peligro que supone el muro, que presenta una grieta horizontal que lo atraviesa casi por completo. A ese respecto, la edil insistió en que las competencias para la solución de este conflicto no pertenecen al Ayuntamiento sino a Consellería, que es la propietaria del edificio.

Cuartero consideró que este es «un problema histórico desde la inauguración del colegio y no de esta legislatura» dado que no se dispone de muro de cierre, «puesto que el colegio utilizó el muro de la urbanización colindante para ello». La edil de Educación añadió que la única opción aportada a través del técnico de Consellería es la construcción de un muro de cierre dentro de la linde del colegio pero esa es «una obra nueva que debe acometer la Consellería».

La edil aprovechó la comparecencia para reclamar a Consellería el profesorado de apoyo que todavía falta por ocupar sus plazas en este colegio y el de Playas de Orihuela, «necesario ante la gran cantidad de alumnos de diferentes nacionalidades», y también en el Fernando de Loaces y la Escuela Infantil de Monserrate del barrio del Rabaloche. «Estas sí son necesidades importantes y no crear polémica, tal y como realizan algunos grupos políticos», zanjó la concejala.