Orihuela Sin Barreras le dijo al Ayuntamiento a finales de enero en un duro comunicado que se habían cansado de ser un «entretenimiento» o que tenían la sensación de que todos «perdían el tiempo» y lejos de reaccionar los responsables municipales ante este colectivo, la situación parece que va de mal en peor.
De hecho, ayer la presidenta, Carmen Díaz, hizo pública una nueva nota en la que critica que ni siquiera se le contesta a sus escritos en los que preguntan por temas que para ellos son tan sensibles como la retirada de las tarimas de la vía pública, algo con lo que no están de acuerdo y que se había acordado por la inexistencia de una ordenanza reguladora. La desaparición de las tarimas son un problema para ellos porque ya no tienen accesibilidad para disfrutar de las terrazas y consideran que la decisión supone «una discriminación», que desaparecería con la publicación de una ordenanza que las regule y, mientras tanto, consideran que deberían mantenerse o reponerse.
El pasado 29 de noviembre preguntaron sobre este asunto y propusieron al Ayuntamiento esta solución, teniendo en cuenta que la Navidad estaba encima, y ayer, en un escrito, explican que a día de hoy ni les han contestado y han pasado más de dos meses. El colectivo pretendía además que todas las terrazas tuvieran su tarima. «Se ha sobrepasado el plazo que marca el reglamento para la convocatoria de la mesa trimestral de accesibilidad y sospechamos que, evidentemente, no se ha resuelto nada sobre este punto», explican. Por ello solicitan una convocatoria urgente de la mesapara abordar estas y otras cuestiones que no han avanzado a día de hoy.
