Los bomberos del parque Torrevieja - Vega Baja Sur han intervenido este jueves para asegurar la fachada del edifico de la Fábrica de Hielo en el casco urbano de Torrevieja. La intervención se ha producido después de un aviso sobre las 21.10 por el desprendimiento de cascotes de la fachada a la acera y la calzada y para evitar que nuevos desprendimientos pudieran suponer un peligro para los peatones o la seguridad del tráfico.

El inmueble se encuentra en la confluencia de las calles Orihuela y Faleria (Acarretos), frente al intercambiador de autobuses de las Eras de la Sal. Los bomberos han desplegado un vehículo de primera salida y el camión autoescalera, que han empleado para acceder a la zona de mayor altura del edificio. Ahí han saneado los elementos que amenazaban con desprenderse y han contado con la colaboración de la Policía Local para cortar el tráfico en la zona.

Buena parte de la acera ha quedado vallada para evitar el paso de peatones.

Intervención de los Bomberos de Torrevieja para evitar la caída de cascotes del edificio protegido de la Fábrica de Hielo

Intervención de los Bomberos de Torrevieja para evitar la caída de cascotes del edificio protegido de la Fábrica de Hielo

Patrimonio

La Fábrica de Hielo es un edificio protegido en el Plan General de Ordenación Urbana de Torrevieja. Además de la obligación genérica de conservación que recoge la legislación para cualquier inmueble, el propietario debe preservar los elementos protegidos del edificio. El inmueble es uno de los más fácilmente reconocibles del centro del casco urbano entre la uniformidad de edificios residenciales. Sobre unos 300 metros cuadrados, en forma de triangular, en los que destaca la cubierta con su característica veleta. Es una de las escasas arquitecturas civiles no residenciales con más de 70 años en pie del trazado urbano local.

Desde hace unos meses cuelga un cartel de venta del "solar" a nombre de una inmobiliaria, aunque legalmente el edificio no puede derruirse porque se debe preservar, al menos la fachada entre otros elementos, por su interés arquitectónico. Como otros tantos edificios protegidos privados de la ciudad su estado de conservación es malo -en busca de la declaración de ruina para poder construir- sin que la administración local -ya sea con un gobierno de izquierdas o conservador- haya tenido especial interés por vigilar y hacer cumplir la legislación de protección más allá de abrir expedientes de infracción automáticos.

Es el caso de la Casa del Parejo, propiedad de una inmobiliaria oriolana, la Casa de López Dols, en la propiedad plantea un edificio de varias plantas, o la Casa de Los Balcones -que prácticamente se ha venido abajo-, sin que los expedientes de sanción hayan tenido consecuencias relevantes ni en multas. La propìedad ha reaccionado con intervenciones al mínimo: tapiado de ventanas, parcheos en las fachadas o en el caso de la Casa del Parejo aprovechando el andamiaje para mentener en pie la fachada para comercializar las futuras viviendas.