Más de 3.500 firmas rechazan en Callosa de Segura que la Conselleria de Vivienda adquiera las 22 viviendas previstas para destinarlas a alquiler social en un mismo edificio, situado en el centro de la localidad. Los firmantes reclaman al Consell que disemine la compra de las viviendas para ese fin por todo el término municipal y no concentradas en el mismo edificio, donde se vendieron en su día cinco de las 27 viviendas que tiene, y esas 22 restantes son las que negocia el Consell adquirir a la Sareb, propietaria de los inmuebles. La recogida de firmas ha sido impulsada por las familias que viven en el edificio y que temen que «puede ser un problema de convivencia, generar un núcleo de discriminación en el centro de la ciudad», señaló al diario el representante legal de los vecinos, José Francisco García, quien entregó las firmas al alcalde de Callosa, Manuel Martínez, quien apoya la diseminación.

Las firmas han sido registradas en el Ayuntamiento y se enviarán al conseller de Vivienda, Rubén Dalmau, «para que tenga en cuenta la opinión de los vecinos y del propio Ayuntamiento», dijo Martínez. «Desde el consistorio estamos a favor de la compra de viviendas sociales y se lo agradecemos a la Generalitat, pero exigimos que se haga de manera diseminada en la localidad», añadió. Desde el Ayuntamiento han solicitado varias reuniones a la Conselleria, aunque aún no se les ha asignado fecha debido a que están elaborando los presupuestos. «Si de nosotros depende la compra no autorizaríamos hacerla toda en el mismo edificio», zanjó el regidor, quien señaló que «repartir las viviendas es beneficioso para los usuarios, para los vecinos del edificio y para las distintas zonas».