Ana celebraba hoy sus 102 años. Y ha recibido, sin poder disimular un gesto de dolor con el pinchazo, pero como un regalo, la primera vacuna contra el covid que Sanidad inyectaba en la Vega Baja. Ha ocurrido este mediodía y la celebración ha sido por partida doble. Ana Mira Palomares, natural del noveldense barrio de la Estación, ha sido la primera de los 115 residentes y 60 trabajadores que han acogido con expectación, emoción y sobre todo mucha esperanza esta vacunación en la residencia Vide Salud de Redován.

Teresa Valero ha sido la primera trabajadora del centro vacunada: "Hemos pasado un año con mucho susto y miedo, un año tremendo. Sin poder abrazar a nuestros internos, sin que los familiares pudieran estar con ellos. Todo ha sido y es por los abuelos, poreso creemos que la vacunación es el comienzo de algo nuevo. Y cuando a la "yaya" la han pinchado he sentido algo muy grande", ha indicado emocionada.

Este centro, como ha recordado este martes su director, Javier Lillo, no ha registrado hasta ahora ningún contagio de coronavirus durante la pandemia pese a que las instalaciones, una de las más importantes de la comarca, se encuentran en una de las zonas de la Vega Baja más castigadas por la segunda ola.

"Mucha emoción y mucha esperanza también es la que hemos sentido, además de la concienciación de los trabajadores que han accedido a vacunarse sin más dudas", según ha explicado Lillo a INFORMACIÓN.

El vehículo que transportaba las vacunas Pfizer-BioNtech desde Alicante ha llegado escoltado por la Guardia Civil para entregar los viales en el centro geriátrico y de discapacitados de grandes dimensiones. Sus instalaciones ocupan un antiguo hospital privado rehabilitado en el año 2000, situado en la carretera que une Orihuela y Redován. Funciona además de forma independiente atendiendo a 120 residentes con dispacidad psíquica que serán vacunados la semana que viene junto a su personal de atención.