El comisionado del Departamento de Salud de Torrevieja, José Antonio García Gómez, ha presentado su dimisión a la Consellera de Sanitat Universal y Salud Pública, Ana Barceló. García Gómez que, durante estos días, ha mantenido que ha sido vacunado cuando le correspondía, renuncia a su puesto para no dañar la imagen de la Conselleria de Sanitat y la Generalitat Valenciana ante la polémica generada tras su vacunación. El Departamento de Salud de Torrevieja ha vacunado a todo el personal sanitario y resto de trabajadores tanto de Atención Primaria como del hospital comarcal.

Barceló ha aceptado la decisión del comisionado y ha valorado que, al margen lo ocurrido con la vacunación, el trabajo realizado por José Antonio García Gómez al frente del comisionado del departamento “ha sido exquisito en todo momento”.

La totalidad de trabajadores del Hospital Universitario de Torrevieja recibió la primera dosis en una operación de vacunación intensiva concentrada en 72 horas, en el que se incluyó al personal administrativo y no sanitario y el de empresas de prestación de servicios subcontratadas como el de limpieza o la de mantenimiento. El primer trabajador en recibir la dosis fue la directora gerente del departamento Eva Baró, y el director médico y la directora de enfermería.

En un comienzo de las vacunaciones para el que se convocó a los medios de comunicación el pasado día 8 de enero. La concesionaria del departamento, Ribera Salud, mantuvo desde el principio en los tres comunicados de prensa que realizó para explicar la vacunación de sus 1.500 trabajadores que en ese proceso se incluía al personal no asistencial y al de empresas subcontratadas que están presentes en el propio hospital de forma permanente. También fue vacunado personal que trabaja los centros de salud y consultorios a diario pero que depende de los ayuntamientos, como es el caso de algunos conserjes de Pilar de la Horadada.

Ribera Salud aclaró que solicitó 1.500 dosis de la vacuna y que anticipó a la Generalitat que su objetivo era vacunar en tres días a todo el personal asistencial y no asistencial y que la administración autonómica accedió a esa solicitud.

El comisionado, que es el representante de la Generalitat en la supervisión de la concesionaria privada de la gestión pública del departamento, ha explicado en su carta de renuncia que el hecho que no ha querido que el debate sobre su vacunación interfiriera en el proceso de reversión en el que está inmerso el centro sanitario, que termina su contrato con la Generalitat en octubre.

El comisionado dimitido, médico de familia y concejal del PSOE en Benejúzar, trabajaba en las mismas dependencias de administración del hospital que los directivos del centro que se vacunaron en primer lugar ante las cámaras.