La construcción de una rotonda en la N-340 a la altura del Barrio San Carlos de Redován se ha convertido en una de las principales reivindicaciones históricas en infraestructuras del Ayuntamiento y, al fin, será una realidad. La alcaldesa del municipio, Nely Ruiz (PP) comunicó este martes, con mucho entusiasmo, que la delegación valenciana de Demarcación de Carreteras del Estado, que depende del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, había notificado al consistorio la aprobación del proyecto. Esta actuación prevé la mejora de la seguridad vial del entorno a través del acondicionamiento de intersecciones, la reordenación de los accesos y el tratamiento de esta travesía, situada entre los puntos kilométricos 691 y 697 de la carretera N-340 en el tramo comprendido entre las localidades de Redován y Albatera. Es un punto negro, con un peligroso cruce, donde se han producido multitud de accidentes, muchos de ellos graves, y la rotonda lo eliminará.

El proyecto cuenta con un plazo previsto de ejecución de unos seis meses y con un presupuesto base de 2.218.058 euros que, tras haber finalizado el periodo de presentación y revisión de alegaciones al mismo, se encuentra en estos momentos en fase de licitación de las obras. El Ministerio ha dado instrucciones a la delegación de Carreteras de la Comunidad Valenciana para que dé inicio al procedimiento de expropiación de los terrenos necesarios para la construcción de esta rotonda.

Se trata de una actuación que los diferentes equipos de gobierno del Ayuntamiento de Redován han reivindicado durante más de tres décadas a través de encuentros con organismos y diferentes autoridades. El proyecto inicial de esta rotonda fue aprobado en 2016, tras lo cual ha sufrido distintos retrasos y modificaciones, y será sufragado a cargo de los Presupuestos Generales del Estado. «Esta es una gran noticia para el municipio, tanto para nuestros vecinos como para todos los que transitan diariamente por estas carreteras para ir a trabajar o acceder a la autovía», señaló Nely Ruiz. La alcaldesa destacó que «supone la eliminación de un punto negro histórico en el que, lamentablemente, se produce una gran concentración de accidentes».

«Esperamos que el Ministerio pueda llevar a cabo la licitación de estas obras lo antes posible para que puedan iniciarse ya que, además de mejorar la seguridad vial de la vía, estas actuaciones también repercutirán de forma beneficiosa para el desarrollo social y económico del polígono industrial San Carlos así como del barrio del mismo nombre», indicó la regidora. Ruiz asegura que la actuación supondrá una mejora en los accesos para las empresas allí instaladas y «para las personas que residen en esta zona de Redován que merecen poder transitar por su barrio con total seguridad, cosa que no pueden hacer ahora mismo», lamentó la alcaldesa redovanense.