Torrevieja celebró ayer el 43 aniversario de la Constitución, que fue ratificada en referéndum el 6 de diciembre de 1978, con un sencillo acto para subrayar su ejemplo de concordia, acuerdo y diálogo. En palabras del alcalde Eduardo Dolón, fue «un día importante para defender nuestros valores, derechos y deberes que recoge la Carta Magna». En este sentido, resaltó lo que su promulgación ha supuesto para la democracia española, poniendo en valor «aquello que nos une más que lo que nos diferencia», en alusión a «las distintas formas de entenderlo que tienen las comunidades autónomas», y destacó la necesidad de «trabajar cada día más para buscar esos nexos de unión».
Como novedad, ayer se contó con la presencia del presidente de la Real Federación Española de Balonmano, Francisco Blázquez, ya que unas horas más tarde las Guerreras se enfrentarían a Austria en el tercer y último partido de la selección española en esta primera fase del Campeonato del Mundo de Balonmano Femenino, que se disputó en el Palacio de los Deportes de Torrevieja.
En algo más de 8 minutos, se interpretaron los himnos de Torrevieja, la Comunidad Valenciana y el nacional, momento en el que se izó la bandera española en el mástil de la Plaza de la Constitución. Como gesto hacia el mundial de balonmano, el alcalde se saltó el protocolo para que Blázquez también participara en el izado junto a él y a la Reina de la Sal -este año Victoria Magoñ Rodríguez-, que son los que habitualmente realizan esta labor. Un gesto que para el presidente fue «un honor», en «un día para conmemorar nuestra democracia y nuestro deporte».
Antes, en el salón de plenos del Ayuntamiento se entregaron a los representantes de los centros educativos de la localidad las banderas que ondean en todos y cada uno de los colegios e institutos.
