Orihuela ha iniciado tres actuaciones para recuperar los márgenes dunares de su litoral, con unos trabajos que cuentan con la colaboración de las brigadas de la Red Natura 2000, el Instituto de Ecología Litoral y el servicio de Costas del Ministerio para la Transición Ecológica.
El concejal de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio, ha visitado Cala Bosque, donde el Ministerio ha realizado una restauración del entorno dunar con la retirada de especies invasoras y la repoblación con plantas propias del hábitat del litoral: "Se ha instalado un vallado blando para delimitar la zona y favorecer la recuperación de arena, con el objetivo de recuperar el perfil dunar", ha explicado.
Además, este tipo de delimitación se ha realizado en Mil Palmeras, ha apuntado el concejal, "para evitar el pisoteo de los bañistas a su paso hacia el chiringuito, al mismo tiempo que se protegen las plantas de jarilla cabeza de gato", una especie endémica.
Con el mismo objetivo e igual procedimiento, el área de Medio Ambiente ha actuado en la duna de La Glea, eliminando las plantas invasoras y para que exista un margen de amortiguación para la maquinaria de limpieza de playas. "Esta duna cuenta con ejemplares en peligro de extinción que queremos proteger", ha destacado Aparicio, que ha subrayado la importancia de estas medidas que "son necesarias para preservar el entorno natural de nuestra costa y evitar que plantas invasoras compitan con la vegetación autóctona propia de nuestro litoral".
En esta zona también se ha recuperado una microrreserva, un rincón en el que se pueden encontrar concentradas en apenas seis hectáreas ejemplares de 56 especies propias del Mediterráneo, algunas endemismos del sureste español con su mayor población mundial representada en este trozo de costa que separa Campoamor de Cabo Roig
Por último, ha manifestado que estos trabajos son recomendaciones de las auditorías de Banderas Azules, por lo que "contribuimos a la mejora de los indicadores para optar a este reconocimiento".
