El caso de las niñas de Tenerife ha conmocionado a toda la sociedad española. El hallazgo en el fondo del mar del cuerpo de Olivia Gimeno Zimmermann, de 6 años, en la tarde del jueves confirmó las peores sospechas de la Guardia Civil y ahora se centran en la búsqueda de Anna, la otra menor, y el padre, Tomás Gimeno.

Numerosos rostros conocidos del panorama español han reaccionado a la muerte de la menor, que falleció a causa de un edema agudo de pulmón según la autopsia a la que fue sometido su cuerpo. El torero Cayetano Rivera ha sido uno de los personajes público que se ha pronunciado al respecto y su comentario ha levantado una gran controversia. "Que un hombre mate a unos niños no es violencia machista, es ser un asesino hijo de la gran puta. Y si es mujer no es violencia feminista, es ser una asesina hija de la gran puta. Y a ambos le deseo la muerte", ha afirmado el diestro a través de su cuenta de Twitter.

Por su parte, la actriz Sara Sálamo ha contestado al tuit de Cayetano Rivera de forma contundente: "Hay personas con un gran altavoz que aún no entienden que machismo y feminismo no son antónimos. Suelen ser los mismos que 'desean la muerte' y que la ejecutan contra, incluso, animales indefensos. Así, no avanzaremos". El mensaje ya acumula miles de retuits y 'me gusta' pocas horas después de su publicación.

La intérprete ha aprovechado las redes sociales para denunciar la violencia machista: "Si ya no encuentran forma de controlarte y maltratarte como pareja, porque has conseguido salir de ahí, buscan la manera de hacerte el daño más terrible e irremediable mediante tus hijos". "¡El machismo no solo nos mata a nosotras! ¡Cuánto dolor! Esto es terrible #BastaYa", ha añadido.

El buque oceanográfico reanuda la búsqueda de Tomás Gimeno y su hija Anna

El buque del Instituto Español de Oceanografía Ángeles Alvariño ha reanudado las labores de rastreo en busca de Tomás Gimeno y su hija de 1 año, Anna, según informan fuentes de la Guardia Civil. El barco oceanográfico, que por primera vez en su historia se ha dedicado al rastreo de personas desaparecidas, interrumpió el pasado sábado su navegación tras detectar una avería en su equipamiento, lo que le motivó a pausar este fin de semana la búsqueda tras trece días continuados de labor.

El Ángeles Alvariño se dirigió a Tenerife desde su base en Vigo para incorporarse a la búsqueda de Tomás Gimeno y sus hijas Olivia y Anna, desaparecidos desde el pasado 27 de abril, y comenzó su rastreo por el litoral de la isla el 30 de mayo.

Cuando tenía previsto abandonar la búsqueda localizó el pasado lunes una botella de submarinismo y un edredón que se identificaron como pertenecientes a Tomás Gimeno. Ello motivó que prolongase su rastreo y tres días después, el pasado jueves, localizó a unos mil metros de profundidad un ancla atada a dos bolsas de deporte, en una de las cuales se encontraba el cuerpo de la pequeña Olivia, de 6 años.

Para estos hallazgos ha sido decisivo el equipamiento del buque, dotado en el fondo de su casco con una ecosonda de presión que le permite captar cualquier anomalía que se encuentre en el fondo marino.