Para los que tenemos perros la salud de nuestros peludos es una de las mayores preocupaciones, sobre todo si nuestro perro ya tiene una edad avanzada. Entre las enfermedades más comunes de los perros mayores está la artrosis, un desgaste de las articulaciones que provoca dolores y limita la movilidad de nuestra mascota. Para poder prevenir y mejorar la calidad de vida de nuestro perro es muy importante reconocer la enfermedad, los síntomas y los posibles tratamientos de la artrosis. Por esto hoy te contamos todo lo que debes saber sobre la artrosis en perros.

¿Cómo saber si mi perro tiene artrosis?

Uno de los primeros síntomas de la artrosis en perros y el más fácil de reconocer es la cojera o los movimientos rígidos que puede presentar el perro al levantarse por la mañana o tras largos periodos de descanso. Lo normal es que estos síntomas de la artrosis en perros desaparezcan a lo largo del día, lo que provoca que muchas personas no le den importancia.

Pero conforme pasa el tiempo los síntomas de la artrosis son más evidentes y suelen agravarse en las estaciones más frías del año como el otoño o el invierno. Además, el dolor que provoca la artrosis en perros hace que tu mascota evite hacer esfuerzos, lo que provoca una reducción de la masa muscular y la sobrecarga de otras zonas, aumentando las molestias. Estos son algunos de los síntomas de la artrosis en perros:

  • Cojera y movimientos rígidos al caminar.
  • Pereza y reticencia a saltar, subir escaleras, jugar o, incluso, salir de paseo.
  • Dolor en la palpación. El perro puede mostrarse reacio a las caricias en la zona (cadera, extremidades...)
  • Cambios en el comportamiento del perro como, por ejemplo, aumento de la inquietud.
  • Lamido constante de las articulaciones afectadas.
  • Fatiga y apatía.

¿Cómo se diagnostica la artrosis en perros?

Es importante que si tu perro presenta estos síntomas acudas al veterinario para realizar el diagnóstico. Lo normal es que tu veterinario revise las articulaciones de tu mascota a través de un examen previo de palpación y estiramientos. Las articulaciones más afectadas generalmente por la artrosis en perros son la cadera, el codo o las rodillas. Además, lo ideal es que se le practique una prueba radiológica para constatar el grado de la artrosis y planificar un posible tratamiento.

Causas de la artrosis en perros

La artrosis en perros puede aparecer a cualquier edad, aunque suele ser más común en perros mayores, y manifestarse en una o más articulaciones, tanto en las extremidades como en la columna. Además es una patología muy frecuente en ciertas razas propensas a las enfermedades articulares como la displasia de cadera. Existen viarios factores que pueden desencadenar la artrosis en perros, aunque estos son los más frecuentes:

  • Sobrepeso o carga incorrecta debido al ejercicio físico.
  • Traumatismos óseos como las fracturas, esguinces o torceduras.
  • Inflamación de las articulaciones provocada por infecciones como la enfermedad de Lyme.
  • Malformaciones o desalineaciones de las extremidades como, por ejemplo, la displasia de cadera.

Tratamiento de la artrosis en perros

En primer lugar debes tener claro que la artrosis no se puede curar, ya que se trata de una enfermedad degenerativa. Sin embargo, existen ciertos tratamientos para reducir el dolor o retrasar el avance de la artrosis en perros:

  1. Perder peso: es muy importante que tu mascota tenga un peso adecuado a su raza y tamaño, ya que la sobrecarga de las articulaciones acelera el desgaste del cartílago y, por consiguiente, la artrosis.
  2. Ejercicio físico: para mejorar la movilidad de nuestra mascota podemos seguir un programa de ejercicios suaves y de baja carga para las articulaciones recomendado por el veterinario, como puede ser la natación o caminar a un ritmo uniforme. Recuerda que es preferible realizar paseos cortos y frecuentes que largos y poco frecuentes.
  3. Complementos alimenticios y pienso específico para combatir la artrosis: existen algunos complementos vitamínicos conocidos como condroprotectores para perros que actúan de forma protegiendo las articulaciones y huesos con el fin de evitar los problemas articulares. Estos suplementos sirven para reducir el malestar que produce la artrosis en perros y contienen condroitina, glucosamina o aceites omega-3. También puedes echar mano de piensos específicos que sirven para reforzar los cartílagos y las articulaciones de tu perro o, incluso, el CBD.
  4. Medicación: tu veterinario puede recetar a tu mascota ciertos medicamentos como antiinflamatorios para tratar el dolor en función de la gravedad de la artrosis.
  5. Medicina alternativa: existen ciertos tratamientos como la acupuntura y la hidroterapia que pueden ayudar a reducir los dolores de la artrosis en perros, lo mejor en este caso es que consultes con tu veterinario.
  6. Camas ortopédicas para perros con artrosis: otra de las cosas que puedes hacer para ayudar a tu mascota a sobrellevar los dolores de la artrosis es proporcionarle un descanso adecuado con camas ortopédicas que protejan sus articulaciones.
  7. Alfombras para evitar que se resbale: si el suelo de tu casa es resbaladizo prueba a colocar alfombras para evitar resbalones.