¿Tienes una sensación de sensibilidad en tus dientes? ¿Han cambiado de coloración? ¿Son ahora más transparentes o tienen grietas o hendiduras en el esmalte? ¿Tienes molestias o dolores? Si es así, puedes estar padeciendo sensibilidad dental, una patología cuyos efectos se pueden atajar o mejorar, siempre de la mano de tu dentista de confianza. Estas son las claves que ofrece el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante (COEA) y el Consejo General de Dentistas de España para paliar estas molestias.

¿Cómo saber si el esmalte está erosionado?

¿Qué es la sensibilidad dental?

La molestia o dolor de dientes provocada por una pérdida del esmalte dental o dentina es conocida como sensibilidad dental. Puede estar provocada por diversos factores y es tu dentista el profesional sanitario quien debe determinar qué está provocando el problema.

La sensibilidad dental cursa con dolor ante cambios de temperatura, cuando consumimos bebidas muy frías o muy calientes. También cuando se consumen ácidos.

¿Qué hacer si sufrimos dolor en los dientes?

Si padecemos sensibilidad dental, lo primero que debemos hacer es acudir a la consulta de nuestro dentista para exponerle nuestra situación y sensaciones particulares. Es el profesional de la odontoestomatología el que mejor puede ofrecerte varias opciones para atajar o mejorar el problema.

La sensibilidad dental cursa con dolor ante cambios de temperatura

Consejos genéricos para prevenir la sensibilidad dental

  1. Usar un cepillo de dientes blando. Con él evitaremos causar más daño al esmalte que recubre el diente y que empeore la sensibilidad dental.
  2. Utilizar una pasta dentífrica que contenga agentes desensibilizantes o propiedades de remineralización.
  3. No ejercer nunca demasiada presión en los dientes cuando utilizamos el cepillo dental.
  4. Limitar los alimentos y bebidas ácidas, los zumos, el café y el vino.
  5. Dejar transcurrir 30 minutos para cepillarte tras tomar alimentos ácidos o dulces. También después de vomitar.
  6. Las bebidas para deportistas suelen contener mucho azúcar y ácidos. Ambos agentes pueden originar erosión en el esmalte y producir caries y sensibilidad dental.
  7. Existen trastornos de la alimentación como la bulimia nerviosa o la anorexia que pueden provocar erosión dental debido a los vómitos frecuentes. Es conveniente consultar siempre a nuestro dentista.
  8. Usa una pajita absorbente para beber a través de ella. Este gesto minimiza el contacto del líquido ácido con el esmalte y, por lo tanto, protege el diente.
  9. Bebe sano. Intenta evitar los líquidos carbonatados y ácidos, que dañan el esmalte.
  10. Una hora antes de dormir, ¡no comas! La saliva tarda una hora en neutralizar los ácidos de la boca. Por eso, hay que evitar comer antes de irse a la cama. 

Consejos para evitar la sensibilidad dental