«Perder la vista es una putada pero con el paso del tiempo lo maduras y acabas sacando la parte positiva de todo». Esta es la filosofía de Jota, como es conocido el deportista paralímpico José Luis García Serrano, quien perdió la vista a los 28 años a causa de un glaucoma derivado de una forma de inflamación ocular denominada uveítis. Actualmente está en plena lucha por la clasificación para los Juegos Paralímpicos de París.

De cómo perdió primero la vista en el ojo izquierdo y seis años después en el derecho, de cómo llegó al mundo de la competición y de su realización personal habló en Alicante a un grupo de jóvenes en una charla motivacional titulada «Haz planes, que la vida se reirá de tus planes» en la que contó con detalle cómo tuvo que adaptarse a sus circunstancias dentro de las VIII Jornadas Sanitarias organizada por el centro de Formación Profesional de Cruz Roja.