Vehículos de media a alta gama y siempre, de refugiados en España por la guerra de Ucrania. Este era el objetivo de un grupo criminal asentado en Alicante y Málaga que robaba vehículos y los falsificaba para venderlos después a compradores de cualquier país de Europa. Actuaban de noche, y desde Alicante y siempre usando autovías y autopistas para llegar lo más rápido a su destino, se dirigían a Málaga, donde dejaban descansar el coche robado en urbanizaciones de clase alta para que pasaran inadvertidos. 25 víctimas han dejado. En la provincia de Alicante repartidas entre la propia capital, Calpe, Pilar de la Horadada, El Verger, Guardamar del Segura, Torrevieja y Villajoyosa. El valor total de los vehículos sustraídos supera el millón de euros.
