Más inversiones contra los apagones. Red Eléctrica de España ampliará la subestación de Xixona para mejorar el servicio y mallar la red de transporte para evitar que una avería deje sin abastecimiento los hogares de la provincia. La mercantil tramita esta actuación y la Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Ocupación aprobó hace dos meses la exposición pública de la autorización administrativa, el proyecto y la declaración de utilidad pública de esta instalación eléctrica en Xixona.

El presupuesto asciende a 1.277.444 euros y la ampliación afecta a más de 10.000 metros cuadrados adyacentes a la actual subestación, que se encuentra junto a la CV-800 entre los parajes de El Espartal y El Vergeret.

Según explicaron fuentes de Red Eléctrica de España, el proyecto contempla la ampliación del parque eléctrico de 220 kV de la subestación, con el objeto de ejecutar una nueva posición (aparamenta eléctrica de protección, maniobra y control) que permita en el futuro mallar la red de transporte de la mitad norte de la provincia de Alicante.

Este mallado de la red de transporte eléctrico significa proporcionar caminos alternativos a la energía, de manera que aunque una instalación quede fuera de servicio por avería, temporal o por tareas de mantenimiento, el suministro a los consumidores pueda seguir estando garantizado. Esto se realiza «para asegurar un suministro no sólo de calidad sino también fiable. La red eléctrica debe configurarse en forma de malla con nodos, que son las subestaciones, interconectados entre sí a través de líneas eléctricas», explicaron.

De cualquier forma, desde la empresa recordaron que la ejecución tanto de esta instalación como del resto de infraestructuras previstas en la provincia está pendiente de la aprobación de la planificación estatal de la red de transporte eléctrico, actualmente en proceso de revisión.

Las inversiones realizadas por Red Eléctrica en la Comunidad Valenciana en el período 2008-2012 ascienden a más de 456 millones de euros. Entre las actuaciones destaca la línea de alta tensión entre Xixona y La Nucía, cuyo coste fue de 24,5 millones con el objetivo de evitar apagones en la costa de la provincia en épocas de mayor demanda como el verano. Se da la circunstancia de que esa infraestructura, que lleva varios años en funcionamiento, ha sido anulada por el Tribunal Supremo por invadir una zona protegida para aves y ahora se tramita la subsanación de este problema, cuya solución no se ha aclarado por el momento.