El alcalde de San Vicente, Jesús Villar, aceptó ayer la renuncia de la concejal de Educación, Sanidad, Consumo y de Bienestar Animal, Belén Arques, quien ha dejado su acta advirtiendo que se va por motivos personales, pero reprochando las luchas internas en el grupo. Y al hilo de los motivos que desgrana la concejala y número 2 del grupo socialista en el que hace referencia a las «estrategias conspirativas» de los ediles fieles al concejal José Luis Lorenzo, el primer edil recoge el testigo para reconocer la «deslealtad» hacia su persona que desde este grupo él también ha sufrido. Y deja al descubierto las tripas de un partido que le ningunea y en el que está en minoría.

Si Belén Arques ha sido contundente en su despedida, el alcalde, que suele ser comedido en sus palabras, ha evidenciado que el grupo está roto y ha señalado al que fue su portavoz, Lorenzo, sin nombrarle, como el instigador de la situación actual.

De la dimisión de Belén Arques asegura que «me entristece que su marcha haya tenido que ver con una decisión personal, pero agravada por la situación que vive el grupo municipal y por no estar de acuerdo con la posición de algunos compañeros de deslealtad con el alcalde», advierte Villar, reconociendo por primera vez las desavenencias y desplantes sufrido.

«Supongo que habrá tenido que ser difícil tomar la decisión, pero seguro que la situación debe haber sido complicada y ha hecho mella en su estado de ánimo. Creo que es momento de reflexionar y decidir si «trabajar por San Vicente» está por encima de los intereses de algunas personas y dejar los ataques y los conflictos», advierte.

Y entre las «deslealtades» que ha acusado Villar se encuentran las reuniones paralelas que se celebran a las del grupo municipal «y donde no está el alcalde ni la primera teniente de alcalde». Y que es donde se toman realmente las decisiones que luego se llevan al grupo o al equipo de Gobierno.

«Duele comprobar, pese al momento tan delicado en lo sanitario y en lo económico como el que estamos viviendo, además del inmenso trabajo que me consta que realizan mis compañeros del grupo municipal, hay quien ya esté pensando en 2023 olvidando para qué fuimos elegidos por nuestros vecinos, no es momento de malgastar tiempo y esfuerzo en disputas palaciegas, sino de encauzar toda nuestra energía y dedicación en solventar los importantísimos problemas de la ciudadanía», advierte el alcalde. Y sentencia que «ha llegado el momento de tomar decisiones para reconducir la situación actual». Unas palabras que han puesto en guardia al grupo socialista.

No es sorpresa

Villar agradece a la dimisionaria «el compartir conmigo sus vivencias en estos últimos tiempos y hacerme ver lo que está ocurriendo a mi alrededor con un grupo de concejales, que no es sorpresa ni para el interior del ayuntamiento, ni para innumerables vecinos, pero que no se pueden dejar pasar por el bien del trabajo diario en el Ayuntamiento, ni del propio PSOE en San Vicente, las desavenencias no son nuevas pero han llegado a unos límites insostenibles para un mínimo de convivencia».

Villar se defiende de la acusación de haber roto el grupo. Y advierte a quien lo diga «que se pare a pensar qué es lo que está haciendo». Y se pregunta «si es que alguien está buscando repetir la historia del PSOE en San Vicente».

Por el momento, y pese a estas duras acusaciones, José Luis Lorenzo ha declinado pronunciarse.

Durante la mañana se sucedieron las reacciones por la dimisión de Belén Arques, que va a dedicarse a la dirección de su colegio. El portavoz del grupo socialista, Jesús Arenas, agradece su trabajo estos dos años en la concejalía y le desea éxitos en su nueva etapa. Y obvia referirse a las críticas de la concejal de las «estrategias conspirativas», del grupo de Lorenzo.

La oposición en bloque ha agradecido el trabajo de la edil que se va. El portavoz de Ciudadanos, Pachi Pascual, ha lamentado que «haya tenido que renunciar a su cargo debido a las disputas internas del PSOE y, como el propio alcalde ha reconocido, a la deslealtad de los concejales de su propio grupo, una situación que, una vez más, acaba afectando negativamente a la gestión del Ayuntamiento». También el portavoz del PP, Óscar Lillo, advierte de que las disputas internas interfieren en el buen funcionamiento del consistorio y el servicio que se da a los vecinos. «Si no se gestionan internamente, ¿cómo van a gestionar una ciudad?». Coincide Adrián García de Vox en señalar que ve «una clara brecha» en el PSOE local. «Aunque todos sabemos que no es nuevo y que viene de mucho atrás».

David Navarro de Podemos y Ramon Leyda de Compromís, coinciden en lo sorpresiva de la dimisión de Arques y agradecen el trabajo de la edil durante estos dos años. A la vez, Leyda apremia a la redistribución de las áreas cuanto antes.

Villar asume las áreas de Arques a la espera de repartirlas

El equipo de Gobierno pierde a una concejal que además ostenta concejalías de peso, especialmente en plena pandemia, como es la de Sanidad y Educación. El grupo socialista tiene que decidir quién toma las riendas de estas áreas o espera a dárselas a la persona que deberá entrar a sustituir a Belén Arques. Por el momento las asume el alcalde. Con probabilidad se dará cuenta en el pleno de febrero de su dimisión. El candidato número 11 de la lista electoral socialista es Juan Antonio López Perona, secretario del área de Urbanismo y Territorio del PSOE local.