El cuerpo de la Policía Local de San Vicente del Raspeig es escaso. De los 86 agentes que debería tener la plantilla, actualmente está cubierta por 69 policías (y ello sin contar con los que están de baja). Y agentes de calle son poco más de la mitad. El concejal de Seguridad, José Manuel Ferrándiz, asegura que todas las noches hay dos patrullas, aunque basta que se produzcan bajas como ya ocurrió en agosto para que no se pueda mantener ese ratio. Esa situación genera inseguridad. Los vecinos de la urbanización Pozo San Antonio han sufrido esta pasada semana un episodio de robos e intentos, incluso con los moradores en la casa. Y su lamento es que no hay presencia policial.
La presidenta vecinal, Mercedes Delgado, apunta que los cacos lo tienen fácil en su urbanización por la falta de vigilancia en la zona: «No hay suficientes policías, y si los llamas vienen cuando pueden. Por eso estamos totalmente desamparados. No tenemos suficiente policía en San Vicente». Y reconoce que el miedo se ha apoderado de los residentes en una zona con 300 vecinos, algunos de ellos ocasionales y de verano.
Una vecina que ha sufrido varios robos explica que «nunca hubo aquí nada parecido a lo que estamos viviendo en los últimos meses». Y añade que hace siete años sufrió su primer robo «después vinieron otros 3 robos más, en enero-febrero de 2017, 2019 y 2020. Todos coincidieron con más robos en otras casas de la urbanización el mismo día. Entraban por la tarde-noche y al volver del trabajo me encontraba las ventanas palanqueadas, la fachada golpeada, todas las habitaciones revueltas, todos los armarios desmantelados y todo tirado por el suelo». Y mientras relata los asaltos de la última semana reconoce que «la sensación de vulnerabilidad y desamparo es manifiesta entre los vecinos».
Desde Ciudadanos, Mariela Torregrosa, reconoce su «preocupación por la falta de agentes y esto se ve en las calles. Esto provoca inseguridad en los ciudadanos y también a los propios agentes». Y cree que uno de los peligros que se corre es no poder atender incidentes que se produzcan simultáneamente. También cree que es preocupante que la edad media de los agentes es alta, puesto que no ha habido incorporaciones en al menos una década. Y advierte que San Vicente tiene menos agentes de lo que corresponde por población. «Elda tiene 100 agentes y va a incorporar más», cuenta. En cuanto a los robos e Pozo San Antonio, la edil de Cs recuerda que ya hubo en septiembre otra oleada de asaltos y el concejal se comprometió a establecer una vigilancia y control en colaboración con la Guardia Civil.
Por su parte, el grupo municipal Popular ha pedido por Registro al equipo de gobierno que pida urgentemente una reunión con la subdelegación del Gobierno y las fuerzas de seguridad estatales, autonómicas y locales «para abordar la problemática de la inseguridad ciudadana en Pozo San Antonio ante la oleada de robos». Que se ilumine la zona. Que haya presencia policial con medios propios o en coordinación con la Guardia Civil con más frecuencia de vigilancia. Incluso que se instalen elementos disuasorios que impidan que los vehículos puedan acceder a la Rambla de Rambuchar, junto a muchas viviendas, y que se instalen cámaras de seguridad en las principales vías.
