Protesta de hambre en Mutxamel por la defensa de Palestina

Un hombre de 71 años deja de comer para pedir solidaridad y sensibilidad con el pueblo de Gaza

Antonio Reverte con su abogado después de firmar el escrito de exención de responsabilidad.

Antonio Reverte con su abogado después de firmar el escrito de exención de responsabilidad. / Elena Sanz López

Elena Sanz López

Elena Sanz López

Antonio Reverte, vecino de Mutxamel, ha anunciado que permanecerá en huelga de hambre indefinida a causa de la grave situación que viven los palestinos desde el mes de octubre del pasado año 2023. 

El hombre de 71 años no ingerirá ningún tipo de alimento, únicamente hidratación, hasta que haya un cambio significativo que ayude a solucionar el estado de bombardeo y asedio que vive la población gazatí, haya un cambio en la conciencia de la ciudadanía o su salud se lo impida.

Antonio, consciente de las consecuencias que puede acarrear tal decisión en su cuerpo, ha optado por firmar un documento en el que se «exime de responsabilidad civil y de cualquier otra índole» a su esposa, hijos y a cualquier otra persona que «se sienta responsable» de la determinación que ha tomado «de forma libre, unilateral y sin presión alguna». 

Momento de la firma del documento mediante el que se exime a la familia de cualquier tipo de responsabilidad civil por la huelga de hambre que lleva a cabo Antonio Reverte.

Momento de la firma del documento mediante el que se exime a la familia de cualquier tipo de responsabilidad civil por la huelga de hambre que lleva a cabo Antonio Reverte. / Elena Sanz López

Cuestión de humanidad

La huelga que comenzó el pasado domingo, 19 de mayo, supone, por un lado, una acción de apoyo y respaldo a otras protestas por la causa palestina como las que se están produciendo en algunas universidades españolas, entre ellas, la Universidad de Alicante (UA). 

Por otro lado, supone un llamamiento a las conciencias de la población española en general porque «no se trata de un tema ideológico, sino de humanidad», aclara Reverte, aunque apela «especialmente a la solidaridad cristiana, por ser el papa Francisco un líder que se ha posicionado de forma justa y ética en el conflicto».

El protagonista de esta historia ha manifestado su «profundo rechazo a lo que hizo Hamás el 7 de octubre», pero también define como terrorismo la actuación del ejército israelí en la franja de Gaza, después de que se haga público que el Tribunal Penal Internacional responsabiliza al Gobierno de Netanyahu de cometer «crímenes de guerra y contra la humanidad». Para Antonio estos términos «ya lo dicen todo». 

«¿Qué puedo hacer por Gaza?»

Antonio asegura que ha sido una decisión difícil por las secuelas que puede dejar en su salud. Además, por la preocupación que supone, sobre todo, para su mujer, pero es algo que lleva meditando desde hace mucho tiempo y sabía que tenía que aportar su grano de arena.

Hace unos días leyó un artículo de opinión escrito por el periodista Pablo Ordaz, en el que cuestiona la moral de la sociedad española por la poca implicación en el asunto concreto de Palestina, cuando sí lo ha hecho otras veces con otros casos de terrorismo. El texto titulado con la pregunta: «¿Y tú qué hacías cuando destruían Gaza?» hizo que Reverte se preguntara: «¿Y yo, qué puedo hacer por Gaza?» Gracias a este cuestionamiento se decantó por pasar a la acción y comenzar una huelga de hambre para llegar al mayor número posible de personas y provocar reflexiones en quienes se hagan eco de su caso, de la misma forma en la que a él, la pregunta de Ordaz le hizo preguntarse de qué manera podía contribuir con el pueblo de Palestina.