La Universitat Politécnica de València (UPV) y el Ayuntamiento de Alcoy siguen estudiando una solución definitiva para el problema de desprendimientos de la Beniata. En estos momentos barajan dos opciones: construir un muro de contención o abancalar la ladera, pero serán los informes técnicos los que determinen cuál es más aconsejable.
El vicealcalde de Alcoy, Jordi Martínez, y la vicerrectora de Infraestructuras de la UPV, Débora Domingo, están manteniendo diferentes reuniones con los técnicos para buscar una solución a los movimientos de tierras que afectan desde 2017 a la ladera de la calle Alicante, conocida como la Beniata. Los fuertes episodios de lluvias de marzo provocaron un nuevo desprendimiento del terreno el pasado 7 de abril, cayendo grandes bloques de piedra sobre una zona habilitada como estacionamiento. El incidente no ocasionó daños personales, aunque sí materiales a uno de los vehículos que en ese momento se encontraba aparcado.
El vial permaneció cortado hasta el pasado 26 abril, fecha en la que el Ayuntamiento lo reabrió de forma provisional con un solo carril para la circulación, el más alejado de la zona afectada. Desde entonces, la administración local ha mantenido al menos tres encuentros con responsables de la institución universitaria, propietaria de la ladera, para tratar de buscar una solución definitiva.
Débora Domingo, en este sentido, ha explicado que una de las opciones que se baraja es la construcción de un muro o contramuro que "vendría a sustituir lo que las naves industriales de la Beniata hacían antes". En este sentido, cabe recordar que la demolición por parte del Ayuntamiento de las fábricas que ejercían de contención agravaron el problema.
Otra posibilidad, según ha indicado la vicerrectora de Infraestructuras de la UPV, "es de mayor envergadura y supone abancalar toda la ladera para rebajar la pendiente". No obstante, Domingo ha insistido en que "lo más importante es que cualquiera que sea la solución, sea consensuada y colaborativamente pensada y ejecutada por la universidad y el Consistorio".
Aunque todavía es pronto para hablar de cifras, lo cierto es que Débora Domingo ha asegurado que la inversión necesaria para poner fin a los desprendimientos "varía mucho de una solución u otra. Hablamos de miles de euros de diferencia". En cualquier caso, "para nosotros la cifra económica no es tan importante como encontrar la solución adecuada".
El rector de la UPV, Juan José Capilla, que ha estado este jueves en el Campus de Alcoy para mantener una reunión de trabajo con el equipo directivo, el profesorado y demás personal del centro, también ha insistido en que "el problema de la ladera de la Beniata es complejo, pero vamos por buen camino". Según ha manifestado, "había que determinar por una parte la titularidad de los terrenos y por otra las causas de esos deslizamientos", pero que en ocasiones "son causas que no están del todo claras, por lo que habrá que esperar a que los técnicos emitan los informes necesarios para poder tomar una decisión.
Capilla también ha insistido en que "estamos llegando a un entendimiento con el Ayuntamiento" y ha afirmado con rotundidad que "de forma colaborativa lo vamos a resolver". En cuanto a las diferentes opciones que se barajan, ha aclarado que "habrá que buscar la más adecuada", haciendo hincapié en que "la diferencia de costes es importante", por lo que forma parte de la negociación con la administración local "buscar fórmulas para repartir gastos".
