Los movimientos de tierras siguen generando problemas en el entorno del polígono industrial Santiago Payá de Alcoy. En esta ocasión, la aparición de un socavón en la misma rotonda que permite llegar a esta zona industrial, a pocos metros de la avenida de salida de la ciudad hacia Alicante, ha vuelto a complicar el acceso. El deslizamiento interno afecta nada más a una parte de la glorieta, mientras que la otra permanece libre, por lo que el tráfico ha tenido que cortarse solo en sentido de salida del polígono. Además, las obras que han tenido que realizarse de urgencia no durarán previsiblemente mucho, según el Ayuntamiento. Aun así, hay que decir que se trata de la segunda incidencia similar que se produce casi en este mismo punto en poco más de un mes, y que es una zona donde han surgido diversos problemas de estabilidad a raíz de las lluvias de la primavera.

Los vehículos pueden acceder al polígono Santiago Payá desde la Beniata, pero la salida tiene que realizarse por el Camí de la Murtera, una vía estrecha que desemboca en la calle Oliver, en el barrio de Santa Rosa. Está previsto que así sea hasta este viernes, aunque no se descarta que la situación pueda prolongarse algo más; si fuera así, para evitar una excesiva congestión en el Camí de la Murtera, se habilitaría el acceso dese la calle Alicante en doble sentido, aunque regulado por semáforos provisionales. En cualquier caso, la cuestión es que este socavón está a apenas 100 metros del punto donde a mediados de mayo se produjo otro deslizamiento que ya obligó a hacer reparaciones de urgencia. Todo ello en una vía que, ya de por sí, cabe recordar, es en sí misma un acceso provisional.

El camino para llegar al polígono Santiago Payá es, desde hace ya una década, un desvío provisional a la calle Filà Andaluces, que literalmente se hundió tras unas lluvias en 2012. Esta pasada primavera, como consecuencia del largo episodio de precipitaciones iniciado a mediados de marzo y que duró prácticamente dos meses, los movimientos de tierras provocados por el agua llevaron a que el puente existente en esta vía se deformara aún más, doblándose como un acordeón. El vial alternativo discurre a una cota algo mayor, dando un rodeo por la ladera, y aunque no presenta complicaciones tan graves como la cerrada calle Filà Andaluces sí sufre también las consecuencias de las lluvias.

También son visibles los problemas de estabilidad del terreno en otra calle anexa, que sale de la rotonda donde se ha producido el socavón y va hasta una de las grandes industrias de la zona. En este vial existe una grieta de grandes dimensiones que amenaza con ensancharse aún más en cualquier momento. Estas incidencias muestran claramente que hay una contingencia de mayor envergadura, ocasionada quizá por filtraciones en el subsuelo, que requerirá en algún momento de una intervención de mayor calado. Conviene tener presente, en este sentido, que en los últimos meses se han producido también problemas de derrumbes, que en algún caso han producido daños materiales importantes.

Previsión de obras

El pleno aprobó hace ahora un mes una modificación de crédito de 400.000 euros para realizar obras de consolidación en la ladera que hay en este entorno, una actuación que debe evitar que vuelvan a registrarse derrumbes y socavones similares la próxima vez que se produzcan lluvias fuertes o continuadas. Eso sí, como publicó este periódico, ese montante corresponde únicamente a única primera fase. El proyecto de mejora general de la zona que se pretende ejecutar comprende la reparación el puente que lleva fuera de servicio ya una década, pero esa intervención y otras se irán realizando a medida que vaya habiendo disponibilidad presupuestaria.

Las lluvias de la primavera de 2022 ocasionaron diferentes problemas por deslizamientos o corrimientos de tierra en Alcoy. El más significativo es el que se produjo en la ladera de la Beniata, junto al comienzo de la calle Alicante, donde cayó un gran volumen de materiales y pudieron haberse producido daños, aunque las únicas consecuencias fueron el cierre de un solar que se utilizaba como aparcamiento. Aunque el Ayuntamiento y la Universitat Politècnica de València (UPV) ya han llegado a un acuerdo para arreglar la zona, todavía no se ha realizado ninguna obra en el lugar. También hay que señalar el socavón que se produjo en un lateral de la carretera del Rebolcat, y que fue finalmente reparado tras varias semanas de obras.