Colocar los DVDs que se ven en la televisión, regular su volumen, ofrecer folletos y entregar y recoger encuestas de opinión. Estas son algunas de las funciones que tienen encomendadas las azafatas que trabajan en las salas de espera de 19 hospitales públicos de la Comunidad Valenciana. La Conselleria de Sanidad adjudicará a una empresa privada la contratación de este personal por cerca de siete millones de euros durante los próximos dos años, a partir de finales del mes de noviembre.

Alicante se llevará más de la mitad de este dinero. Más de cuatro millones de euros para implantar el servicio en los siete hospitales públicos de la provincia.

Según el pliego de condiciones técnicas de este contrato, al que ha tenido acceso INFORMACIÓN, el principal cometido de las azafatas es el de informar a los pacientes y a los acompañantes que se encuentren en las salas de Urgencias de los hospitales sobre la localización del enfermo, tiempos de espera o nombre del médico responsable. Sin embargo, "en ningún momento el personal proporcionará información médica del paciente".

Entre los cometidos de las azafatas destacan otras actividades de carácter más "funcional" como "la colocación y retirada de los DVDs, entrega de prensa gratuita, si la hubiera, o de folletos sobre el servicio de urgencias o del hospital". Curiosamente, el pliego de condiciones también recoge una relación de funciones que, por contra, no corresponden al personal de los puntos de información y entre las que se especifican cometidos como el de "regar las plantas, llamar a ambulancias, entregar material sanitario o calentar biberones".

Un servicio útil para Sanidad

Desde la conselleria, su secretario autonómico de Sanidad, Luis Rosado, defendió ayer la "necesidad y utilidad" de este servicio, que "está relacionado con la calidad asistencial" que se presta al paciente. Aunque Rosado rechazó emplear para estos trabajadores el término de "azafata", en el pliego de condiciones de la Conselleria se establece que "para la prestación de este servicio, la empresa adjudicataria deberá disponer de personal con categoría de azafata".

Aunque este personal de información comenzó a implantarse en los hospitales de la Comunidad en el año 2004, "es la primera vez que se adjudica este servicio mediante un concurso por lotes, ya que hasta ahora las contrataciones se hacían desde los propios hospitales", según matizó ayer el secretario autonómico de Sanidad.

Por otro lado, Rosado negó que las plantillas para contratar a personal en Sanidad "estén congeladas, ya que seguimos abriendo nuevos centros de salud y hospitales, como el de Elche".

Entre los requisitos que Sanidad exige a las azafatas que trabajen en las salas de espera de Urgencias de los hospitales figura el de tener conocimientos de informática a nivel usuario, haber realizado previamente un curso de formación de 20 horas, así como saber valenciano e inglés a nivel intermedio, aunque las direcciones de los hospitales podrán exigir el conocimiento de otro idioma. En este sentido, uno de los cometidos de este personal pasa por el de acompañar a pacientes y familiares de otras nacionalidades.

Aunque en el pliego de condiciones se establece que "bajo ningún concepto el personal de los puntos de información accederá al interior de la historia clínica del paciente", sí que se obligará a los trabajadores que presten estos servicios "a firmar una declaración asegurando el tratamiento confidencial de todas las informaciones a las que tenga acceso".

Oposición y sindicatos piden al Consell que cambie sus prioridades

El Grupo Socialista de la Diputación exigió ayer a la Generalitat que recapacite "y cambie sus prioridades en materia sanitaria ya que pretende pagar cerca de 7 millones de euros a una empresa privada para que contrate a personal que se encargue de informar en Urgencias, cuando las plantillas sanitarias están raquíticas y con vacantes sin cubrir", indicó la portavoz socialista María Teresa Carbonell. Desde CC OO no se cuestiona la profesionalidad de quienes desarrollan esta labor en Urgencias, "sino la incoherencia de privatizar un servicio de información al paciente, algo que debe ser inherente al sistema sanitario", asegura Salvador Roig, responsable de Comunicación del sindicato. Respecto a las plantillas de personal, Roig recuerda que "las sustituciones se conceden con cuentagotas y las necesidades deben estar muy justificadas para que Hacienda autorice la creación de una nueva plaza en el ámbito sanitario". Al mismo tiempo, y en respuesta a las declaraciones de Rosado en las que afirma que Sanidad "sigue abriendo nuevos centros de salud en toda la provincia", CC OO recuerda el retraso que acumula la construcción de estas infraestructuras sanitarias, con nueve centros presupuestados y pendientes de ejecutar, algunos de ellos desde hace años. Además, añade Roig, "en la ciudad de Alicante no se ha puesto en marcha ninguna de las instalaciones sanitarias prometidas por el PP durante la última legislatura". P.A.