Su blog es uno de los más populares del mundo en lengua española y está considerado un experto en internet y nuevas tecnologías. Enrique Dans fue ayer el invitado especial del congreso Alicante Smart Cities Meeting 2011. En su opinión, Alicante tiene que sacar más partido a las redes sociales para promocionarse turísticamente.
¿Qué es una Smart City?.
Es una ciudad que permite el desarrollo de la vida de los ciudadanos con un modelo que tiene su reflejo en lo digital.
¿Cree que Alicante lo es?
A la mayoría de las ciudades les queda un trecho. Hay que desarrollar un modelo de comunicación no sólo para quienes están viviendo en una ciudad, también para quienes la visitan. En Alicante el turismo es muy importante y hay que hacer que se sientan cómodos.
¿Cuál es el camino a seguir para conseguirlo?
Hay que pensar en los mecanismos de promoción de la ciudad. En cómo empaquetas y vendes el modelo a quienes quieren visitarla. Hay que tener en cuenta que nos alejamos cada vez más de las campañas publicitarias tradicionales y vamos hacia un modelo de boca-oreja. Por ello, la ciudad tiene que preocuparse de ser una plataforma sobre la que los visitantes puedan dejar sus recomendaciones. Hay plataformas ya inventadas, como Twitter, Facebook, etc.
¿Quiere decir que debemos sacar más partido a las redes sociales como mecanismos de promoción de la ciudad?
Así es. Un ayuntamiento tiene que ser consciente de que existen y de que funcionan de cara al marketing. En ellas, los turistas comparten sus experiencias y las administraciones tienen que saber qué se está diciendo e identificar los problemas para mejorar sus servicios. Por un lado, con ellas se puede promocionar la ciudad y, por otro, pulsar la opinión de los visitantes.
¿Qué beneficio puede tener para la ciudad?
Tener un visitante comunicando una experiencia interesante en la ciudad a través de su facebook puede tener un efecto de prescripción que no consigue un anuncio o un folleto. Esos mensajes llegan a sus amigos porque vienen de esa persona. Resulta más económico y más efectivo. Hay que vender historias no sólo un sitio, un paisaje o una playa
¿Considera que las ciudades deben reinventarse de cara al futuro?
Creo que deben adaptarse a una realidad que ha cambiado. Hace cuatro o cinco años la persona que escribía en Twitter o subía fotos a Facebook era un friki y ahora es un ciudadano normal. Es extraño que un turista nórdico no lleve su smartphone y no esté comentando su experiencia sobre la ciudad a tiempo real. Lo que tiene que lograr la administración es que esos comentarios sean buenos y crear plataformas para facilitar el desarrollo de ese ecosistema.
Estamos en crisis, ¿de dónde sacar la financiación para ello?
Es una cuestión de actitud. Puede tener un coste inicial, pero no requiere tantos recursos. Es más una cultura de apertura.
