La Conselleria de Sanidad tiene aún pendiente de cobro más de la mitad del dinero facturado a lo largo del año pasado en la provincia de Alicante por atender a ciudadanos extranjeros sin cobertura en el sistema público, según los datos ofrecidos por el propio departamento. Hasta el momento se han ingresado por este concepto 123.910,91 euros, cuando el coste generado por la prestación de estos servicios asciende a 283.856,56 euros. La Generalitat sólo ha logrado hasta ahora que se satisfaga el importe de 894 de las 2.266 facturas emitidas en consultas de Urgencias de hospitales y centros de salud alicantinos.
Fuentes de la Conselleria explican que el impago de buena parte de la facturación a extranjeros se debe a que muchos de estos casos se gestionan con las compañías aseguradoras de los pacientes, que son las que en último extremo deben satisfacer esa cantidad. No obstante, desde el departamento autonómico no han podido precisar si existe algún plazo estimado para cobrar ese dinero. Las mismas fuentes sí recalcan, en todo caso, que sobre las facturas pendientes se realizan los apremios previstos en la Ley General Tributaria del Estado.
De esta forma, en la práctica la Generalitat delega en el Ministerio de Hacienda el cobro de la atención sanitaria no cubierta por el sistema público. Previamente, no obstante, sí se hace un requerimiento al paciente a través del Diari Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV), notificándole la existencia de la deuda. Si en un plazo de 15 días no se satisface el impago, se pone en marcha el procedimiento previsto en la legislación estatal. Desde la Conselleria señalan que, a partir de este punto, es ya la administración tributaria la que lleva al cabo el seguimiento de los casos.
La facturación está prevista para extranjeros sin cobertura sanitaria gratuita. Uno de los argumentos para su aplicación es evitar el denominado turismo sanitario, con el que personas de otros países acudían a operarse a centros públicos. No obstante, la medida también ha afectado a colectivos como los residentes en situación irregular.
