Controlar al paciente las 24 horas del día, una semana consecutiva. Con este objetivo, la Unidad del Sueño de la Clínica Vistahermosa ha incorporado unos sensores que permiten medir de forma continua determinados factores que influyen en el descanso, como la actividad física, la temperatura corporal o la luz.
El paciente lleva estos sensores en el brazo durante una semana, «con lo que se pueden monitorizar los ritmos biológicos de la persona, como el ritmo vigilia-sueño o el ritmo de temperatura corporal y los factores externos que influyen en nuestro sueño, como es la luz ambiente y la actividad física», explica Paula Giménez, responsable de la Unidad del Sueño. De esta forma, «se obtiene una información más veraz, sobre las horas reales que duerme una persona o la calidad del sueño». Los estudios de cronobiología están indicados para personas que sufren insomnio o con una percepción de mala calidad de sueño. La Clínica Vistahermosa también está empleando esta técnica en deportistas, para diseñar los entrenamientos en función de sus ritmos biológicos.
