El Colegio Inmaculada-Jesuitas de Alicante celebró el 14 de octubre su 60 aniversario. 60 años lleva este centro educativo adaptándose en cada momento a las necesidades de aquellos a los que pretende servir.

Ladrillo a ladrillo

El primer encuentro de la Compañía de Jesús, en su labor educativa, con la provincia de Alicante se remonta a finales del siglo XVII, con la fundación del Colegio de Nuestra Señora de la Esperanza, en cuyas aulas se formará, entre otros, el alumno Jorge Juan.

En 1767, tras el decreto de expulsión de Carlos III, dicha labor quedó interrumpida. Pasado el tiempo, durante la segunda década del siglo XX, la Compañía de Jesús abrigaba el deseo de edificar un colegio en Alicante. Se adquirieron unos terrenos por el barrio de Benalúa, realizándose en 1921 unos planos del que debería ser el «Colegio de la Concepción». La falta de medios económicos no permitió que el proyecto fuese llevado a cabo.

En 1954 se inician las obras del actual colegio, que por deseo del P. Pastor, iba a llamarse «Colegio Sagrada Familia», pero la celebración ese mismo año del Centenario del Dogma de la Inmaculada, fue determinante a la hora de poner el nombre al colegio, «Colegio Inmaculada».

Terrenos llenos de servicios

Los terrenos del edificio abarcaban 500.000 metros cuadrados y la superficie edificada era de 16.000 m2. Diseñado para 750 alumnos, acoge en un primer momento a 557 (158 procedentes de la capital), 32 jesuitas y 13 seglares (profesores y personal auxiliar). En el momento de la inauguración faltaba por edificar uno de los pabellones, el salón de actos y las instalaciones deportivas. El comienzo del siguiente curso lo pudieron seguir 1200 personas en el flamante Salón de Actos que se inauguraba para tal ocasión.

60 años de historia educativa

En estos 60 años el colegio Inmaculada ha sabido evolucionar conforme a los tiempos, un potente plan de formación permanente en el que participan todos sus educadores, incorporando nuevas herramientas didácticas basadas en las TIC, ampliando el horizonte de sus alumnos mediante programas europeos de Erasmus+ con centros de Noruega, Bélgica, Polonia, etc. Actualmente están inmersos en plena elaboración de un profundo Proyecto de Innovación Educativa (Vein21uno).

Ante todo es un colegio ignaciano, ser un colegio de la Compañía de Jesús «significa educar y vivir los valores evangélicos y cultivar las virtudes desde la interioridad y la espiritualidad propias de la tradición ignaciana, trabajadas desde la libertad personal y vividas en un entorno de pluralismo y de sentido de la justicia».

El objetivo de este centro es contribuir a una sociedad mejor, que busque el bien común, más humana y sensible. Se identifica y apuesta por una vocación de servicio hacia los demás para estimular la transformación en las personas, acompañándolas y provocando experiencias fundamentales.

Y de esta manera, el Colegio Inmaculada-Jesuitas de Alicante ha llegado a su 60 aniversario, el cumpleaños se celebró el 14 de octubre, adaptándose en cada momento a las necesidades de aquellos a los que pretende servir.

Contentos y agradecidos a tantas y tantas familias alicantinas que han confiado, a lo largo de estos años y siguen confiando hoy, la educación y formación de sus hijos a la Compañía de Jesús.

Vein21uno, nuevo modelo educativo

Vein21uno nace como proyecto para dar respuestas nuevas y eficaces a 10 constataciones socioeducativas a las que no se puede renunciar

Durante 60 años el Colegio Inmaculada, fiel al estilo de los centros educativos de la Compañía de Jesús, se ha mantenido alerta ante las nuevas demandas de esta sociedad, y hacia las corrientes y metodologías emergentes que han dado respuesta a esta realidad. Todo ello siempre con la misión de, con el alumno como centro del proceso de enseñanza-aprendizaje, ofrecer una formación integral, tratando de crear hombres y mujeres para los demás.

10 necesidades que requieren respuesta

Vein21uno nace con el objetivo de dar una respuesta nueva y eficaz a 10 constataciones socioeducativas a las que, como colegio de la Compañía de Jesús, no podemos renunciar:

1. Reducir la volatilidad de los aprendizajes.

2. Aumentar la motivación intrínseca del alumnado.

3. Ofrecer respuestas a nuevas demandas sociales y laborales.

4. Situar al alumno en el centro del proceso de aprendizaje.

5. Cambiar el rol del alumnado, del profesorado y de las familias en el aula y en la escuela.

6. Superar las dificultades y limitaciones del actual modelo de atención a la diversidad.

7. Integrar en mayor medida la dimensión socioemocional y religiosa del alumno en la dinámica diaria del aula.

8. Desarrollar un concepto de aprendizaje más amplio, dando un papel protagonista al impulso de la creatividad, del pensamiento crítico y de la autorregulación.

9. Incorporar las TIC como herramienta cotidiana de aprendizaje.

10. Generar una mayor apertura del centro y de la vida del aula al entorno social de los alumnos.

Sin embargo, rede?nir la idea de colegio y el modelo organizativo-pedagógico del mismo, implica necesariamente abrir un proceso de reflexión compartido, como se hizo en la primera fase del proyecto: «Un Colegio por soñar», en la cual 126 familias, 1780 alumnos, 136 profesores y empleados, recogieron 2713 ideas organizadas en 7 ámbitos: Métodos y contenidos, Alumnado, Valores, Tecnologías y recursos, Profesorado, Espacios Educativos y, Familia y entorno.

8 principios generales

El Colegio Inmaculada se encuentra inmerso en la segunda fase del proyecto: el proceso de concreción y definición de un nuevo modelo pedagógico-organizativo que, sin perder los orígenes, la tradición y la identidad de cualquier colegio de los jesuitas, pueda dar la mejor respuesta a estos anhelos. Un nuevo modelo que, en función de las etapas educativas y de la edad del alumnado, se concretará en base a 8 principios generales:

1. Generación de aprendizajes más interactivos y contextualizados. Cooperación y aprendizaje social.

2. Mayor desarrollo de las estrategias de aprendizaje relacionadas con la personalización y la metacognición. Pensamiento crítico, creatividad y autorregulación.

3. Concepto de aprendizaje como capacidad de resolver problemas y de generar inquietudes.

4. Atención a la diversidad integrada en el currículo y en el aula.

5. Aprendizaje por descubrimiento basado en proyectos. Profesor como mediador-facilitador.

6. Apertura del aula y del centro al entorno y a la realidad social del alumnado.

7. Trabajo en equipo del profesorado.

8. Formación permanente y especialización del cuerpo docente.

Todo ello supondrá, entre otros aspectos, la generación de nuevas estructuras, de nuevos espacios, de nuevos planteamientos metodológicos para el aprendizaje y para la evaluación, etc. En definitiva, una nueva forma de ser y estar en la escuela que tendrá su concreción el próximo curso en 3 años de Educación Infantil y 4º de Educación Primaria, para ir creciendo curso a curso. Estáis todos invitados a participar y a conocer Vein21uno, porque Vein21uno ya está aquí, y ha venido para quedarse.

A VISTA DE PÁJARO: COLEGIO INMACULADA JESUITAS DE ALICANTE