"Mi reto es despertar vocaciones tecnológicas y de investigación en las niñas". Esta es una de las aspiraciones que la ingeniera de Telecomunicaciones, doctora por el MIT de Massachussets y directora de Investigación en Ciencias de Datos en Vodafone, la alicantina Nuria Oliver, se ha marcado tras regresar a Alicante a vivir y para ello va a impartir charlas a alumnos de la Eso y Bachillerato, según ha anunciado después de pronunciar la conferencia "Human Behavior Modeling from (Big) Data" en la Politécnica de la Universidad de Alicante (UA).

"Quiero compartir mis experiencias e inspirar y fomentar un mayor número de vocaciones", además de "contribuir a conseguir un impacto positivo a nivel local y dar visibilidad al desarrollo tecnológico en nuestra zona", asegura la doctora, que ha trabajado para Microsoft y Telefónica y ahora lo hace para Vodafone.

Oliver es experta en comportamiento humano computacional, es decir, en cómo crear sistemas inteligentes que entiendan a los humanos "y nos puedan ayudar". Dentro de ello, trabaja en dos áreas, las "smart cities" o ciudades inteligentes y el "Big Data for social good", cuyo objetivo es "aprovechar la disponibilidad de datos que tenemos hoy en día y que no tiene precedentes en la historia para tomar las mejores decisiones en salud pública, desastres naturales, desarrollo económico y seguridad".

Así, compartió sus experiencias con alumnos y profesores de la Escuela Politécnica y les explicó, por ejemplo, su experiencia en el uso de los datos de telefonía tras un terremoto o un estudio en el que participó acerca de la criminalidad en Londres.

En el caso de Londres se trataba de demostrar los "puntos calientes" del área metropolitana donde era más probable que se produjera un crimen tras cruzar datos muy minuciosos del censo con datos generados a través de la telefonía móvil. Y también demostrar la validez de las teorías de dos sociólogos, Newman y Jacobs.

Jacobs salió ganando. Defendía que cuanta más diversidad y movimiento había en una ciudad menos crímenes se cometían mientras que Newman creía que cuanto más cerrada era una sociedad menos crímenes se cometían al actuar los propios vecinos como "policías" y detectar de manera rápida al miembro que no pertenecía a la comunidad.