Poco más de la mitad de la población de la provincia de Alicante, 1.043.464 personas, entrará mañana a la fase 1 de la desescalada. De esta forma podrán, entre otras cosas, poder salir de su municipio de residencia dentro de las condiciones previstas, pero sin alejarse de su entorno más cercano. La orden publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE) señala que se permite la movilidad dentro del área territorial de referencia, que en la Comunidad Valenciana es el departamento de salud. Así, los desplazamientos serán comarcales, o en ocasiones ni eso, ya que hay municipios que pertenecen a una zona sanitaria diferente a la de su comarca e incluso una de ellas, la Vega Baja, está troceada en dos áreas.
Toda esta comarca entra en fase 1, salvo la pequeña pedanía oriolana de Barbarroja; sin embargo, está repartida entre los departamentos de salud de Orihuela y Torrevieja. Este último comprende todo el litoral y la parte más oriental de la Vega Baja, incluyendo la costa de Orihuela y la pedanía de Torremendo, con lo que los vecinos de estas zonas no podrían desplazarse a su capital municipal sin motivo justificado. El límite entre las dos zonas sanitarias separa además localidades muy próximas entre sí, como Almoradí y Formentera del Segura.
El único departamento de salud que se corresponde tal cual con una comarca es el de la Marina Baixa, y el problema es que gran parte de la población desconoce por dónde discurren los límites entre áreas sanitarias. Una de las zonas de mayor complicación se encuentra en el sur del Medio Vinalopó; Novelda está adscrita al hospital de Elda, pero Monforte del Cid al General de Alicante y Aspe al de Elche-Crevillent, al igual que los Hondones y Barbarroja, áreas que siguen en fase 0. Asimismo, Tibi queda separado del resto de la Foia de Castalla al pertenecer al departamento de Sant Joan, que no cambia de escenario. En cambio, un municipio que sí forma parte del área sanitaria de Alcoy pese a estar en la Marina Alta es la Vall d'Alcalà, cuyos vecinos todavía no podrán desplazarse al resto de la comarca sin una causa argumentada.
Los departamentos de Elda, Alcoy, la Marina Baixa y Dénia forman un continuo territorial entre sí y con los de Xàtiva-Ontinyent y Gandia, pero esto no implicará por ahora libertad para desplazarse en todo ese gran espacio central que queda entre Alicante y València. Preguntada ayer por si sería posible esa movilidad, la consellera Ana Barceló estimó que «será dentro del propio departamento», aunque dijo que se iba a estudiar si la norma permitía salir a otras zonas en fase 1.
El BOE sólo hace mención expresa, en este sentido, a los enclaves de una provincia en otra como el Rincón de Ademuz, que ayer la Generalitat cambió de fase 0 a 1 al estar rodeado por Teruel y Cuenca, que han pasado a ese escenario. El País Vasco, por su parte, amplió la movilidad a municipios colindantes de provincias distintas, algo que de aplicarse en la Comunidad beneficiaría a localidades como Pego, Alfafara y Banyeres.
Crevillent, Aspe y Monforte creen «injusto» quedarse fuera
El alcalde crevillentino recalca que tienen los «mejores» índices y los del Medio Vinalopó no ven diferencias entre ellos y Novelda
Los alcaldes de Crevillent, José Manuel Penalva (Compromís), de Aspe, Antonio Puerto, y de Monforte del Cid, María Dolores Berenguer, estos dos últimos de EU, denunciaron ayer que «no entienden» la decisión de excluir a sus respectivos de la fase 1 de la desescalada. Además, pidieron explicaciones a la Conselleria de Sanidad y al Gobierno por una resolución que calificaron de «injusta».
Los tres primeros ediles, cuyos partidos son socios de gobierno del PSPV en la Generalitat, señalaron que llevan mucho tiempo solicitando los datos de contagiados por población sin encontrar una respuesta. Se da asimismo la circunstancia curiosa de que Aspe, que pertenece al área de salud de Elche-Crevillent, y Monforte, incluido en la de Alicante-Hospital General, se encuentran a apenas tres kilómetros de Novelda, que forma parte del departamento de Elda y, por tanto, sí ha pasado a la fase 1.
El alcalde de Crevillent, José Manuel Penalva, recordó que «según las autoridades sanitarias del Hospital del Vinalopó y la Conselleria de Sanidad nos encontramos en el último tramo de la curva epidemiológica y en los índices de contagios, ingresos en UCI y camas disponibles, así como la tasa de mortalidad, somos de los mejores de la Comunidad, encontrándonos con un riesgo muy por debajo de otros departamentos como el de Elda, Alcoy o Torrevieja, que sí han pasado a la siguiente fase». Penalva señaló que «merecemos una aclaración y esperamos que nos proporcionen la información con la mayor precisión posible, no solo para poder comprender esta decisión, sino también para poder actuar y adoptar las medidas necesarias para evolucionar a la siguiente fase y comenzar con la reactivación económica cuanto antes».
En términos similares se pronunció el alcalde de Aspe, Antonio Puerto. «Tenemos que pedir explicaciones sobre los resultados en los que se han basado para tomar esta decisión. Los datos que Conselleria tiene de nuestra área sanitaria avalan que deberíamos pasar a la fase 1. Hay que proteger la salud, pero el esfuerzo que están haciendo todos los vecinos y vecinas y los comerciantes no se ven compensado con esta decisión».
La alcaldesa de Monforte, María Dolores Berenguer, consideró por su parte «un enorme agravio comparativo» que poblaciones vecinas como Novelda, a muy pocos kilómetros, sí pase a la fase 1. La primera edil monfortina recordó también que el Hospital General de Alicante ha reforzado su capacidad con el recinto de campaña.
