Médicos y enfermeros de la Comunidad Valenciana deben compaginar su labor sanitaria en su jornada laboral con otra que se les ha asignado, la de rastreadores del coronavirus, sobre todo los de los departamentos de Medicina Preventiva. La Conselleria de Sanidad informó el pasado mes de mayo que había contratado a 1.210 profesionales para realizar ese rastreo desde Atención Primaria, en concreto 600 enfermeras, 334 auxiliares administrativos, 185 celadores y 91 Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (Tecae) y en este momento son casi 1.100 (20 por cada 100.000 habitantes) los que están realizando esta labor, tras la contratación de 85 nuevos en julio, principalmente personal técnico documentalista.
Sin embargo, no todos están dedicados en exclusividad a las labores de seguimiento de contactos en casos positivos por coronavirus. Muchos de los rastreadores es personal de medicina y de enfermería que debe dedicar parte de su jornada a la del rastreo. «Es una chapuza por parte de la Conselleria el aumentar la carga de trabajo que ya tienen en lugar de contratar más personal específico para hacer las tareas de rastreo», critica José Peris, del Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV).
Una tarea adicional añadida que conlleva una carga de trabajo tremenda para estos sanitarios. «Para hacer bien las labores de rastreo de los casos de covid la Conselleria tendría que buscar a gente que lo haga en condiciones, dedicada solo a eso», indica Peris. «Salud Pública debe contratar más personal específico del que hay para buscar los contactos de quienes dan positivo y evitar que se extienda la pandemia», señala el sindicalista quien, además, pide a Sanidad que deje de centralizar todos los resultados de las PCR en el Hospital General de Alicante para evitar retrasos en conocer los mismos por la saturación.
