Diez fiestas disueltas en viviendas particulares tras el toque de queda y otras tres en la vía pública fue el balance de la Policía Local de Alicante durante la Nochebuena, ha informado la concejalía de Seguridad. Una velada que en Elche se saldó con otras 20 actas de sanción por molestias por ruidos a los vecinos y otras 18 sanciones por incumplimientos de las normas anti-covid. Las policías locales de ambos municipios organizaron operativos especiales para velar por el cumplimiento de las medidas sanitarias y del toque de queda.
El operativo en Alicante estaba compuesto por patrullas de vigilancia a pie, así como controles y un dispositivo fijo en la barriada de Juan XXIII. A pesar de las actuaciones realizadas, desde la Policía Local se subrayó que la noche había transcurrido sin incidentes graves y con normalidad. El concejal de Seguridad, José Ramón González, ha pedido «máxima responsabilidad esta Navidad», y ha mostrado la seguridad de que «los alicantinos van a seguir cumpliendo de forma ejemplar y colaborando, como han hecho hasta ahora, con todas las medidas para ganar la batalla a la pandemia y poner freno a los contagios, debemos continuar extremando las medidas de prevención higiénico sanitarias en el uso de mascarillas, distancias sociales evitando las fiestas, reuniones sociales y botellones».
Elche vivió una Nochebuena y una Navidad sin incidencias de consideración, dos jornadas en las que la Policía Local incrementó los controles de alcoholemia y drogas, así como las actuaciones relacionadas con las restricciones del estado de alarma. «Los agentes de Elche se han quedado sin vacaciones ni permisos estos días para disponer del mayor número de refuerzos posible», explicó el concejal de Seguridad, Ramón Abad, quien ayer destacaba el buen comportamiento de la población ilicitana durante la pasada Nochebuena en la que apenas se registraron incidentes.
Tres fiestas en plena calle
Tres de las fiestas en las que tuvieron que intervenir los agentes de la Policía Local de Alicante se estaban celebrando en plena calle en la zona norte de la ciudad. La primera de ellas en la calle Padre Cerdá, donde a las 22.20 un grupo de personas estaban celebrando una fiesta de Navidad que se disolvió. De madrugada, se tuvo que actuar en otra fiesta callejera en Maestro Rasillo, donde se estaban montando altavoces y varias personas se estaban reuniendo, incumpliendo el toque de queda. Poco después, los agentes municipales intervinieron en otra concentración en la calle San Juan de la Cruz, donde un grupo de ciudadanos sin mascarillas y con música fueron localizados y sancionados.
Asimismo, la Policía disolvió diez fiestas celebradas en viviendas, todas ellas pasado el toque de queda. Los agentes acudieron por quejas de ruidos, que se saldaron con denuncias a los dueños de las viviendas en las que se celebraban. La primera actuación fue sobre las 00.11 horas en la calle Reino Unido, con posterioridad entre la 1,20 y las 2 horas de la madrugada se disolvieron siete reuniones y fiestas en las calles Plus Ultra, avenida de Alcoy, Pasaje Colonización, Guixot, Canónigo Galbis, Periodista Pirula Arderius, Carcaixent y en la calle Músico Moisés pasadas las cinco de la madrugada, entre otras. Celebraciones que se suman a las otras once en la que los agentes tuvieron que intervenir la noche anterior.
