Solidaridad. Por primera vez en la dilatada historia de la donación de material de primera necesidad y alimentos no perecederos para el pueblo saharaui, la Universidad de Alicante se ha ofrecido desinteresadamente como contenedor excepcional y con todas las medidas anticovid para la caravana, incluidos autobuses y ambulancias, que desde el País Vasco y Cantabria irán hacia Tinduf.
Dih Nousa lleva decenas de años coordinando la caravana de donativos que a nivel nacional sale todos los años desde el Puerto de Alicante hacia Orán, en dirección a los campamentos de refugiados en Tinduf, y no recuerda haberse visto en un apuro semejante que, sin embargo, se ha resuelto con inusitada rapidez gracias a la predisposición de la Universidad de Alicante.
La coordinadora de la asociación provincial por el pueblo saharaui, Ángela Carrillo, que comparte con la UA numerosos proyectos de colaboración, entre otros el de la Escuela de Enfermería con los refugiados, contactó con el vicerrector de Infraestructuras, Salvador Ivorra, y de la mañana a la tarde quedó todo resuelto.
La Universidad ha cedido el amplio aparcamiento de los autobuses, prácticamente vacío en estos momentos por la pandemia, pero perfectamente resguardado mediante cámaras de seguridad y en un recinto cerrado. «Valoramos varios emplazamientos, incluso pensamos en el parque científico, y optamos finalmente por este parquing en el que podríamos acoger incluso más vehículos de los que han traído», destaca Ivorra.
El parquing cuenta además con un «excelente acceso al campus desde las distintas autovías que llegan a Alicante, así como para su posterior desplazamiento hacia el Puerto», añade.
El vicerrector no dudó en desplazarse para estar presente en la operación de recepción y estacionamiento de la caravana humanitaria, que abarca hasta el momento 100 toneladas de alimentos no perecederos, el 80% del total de la carga, junto a productos de primera necesidad como mantas, ropa, material higiénico y piezas de repuesto, como precisa Dih Nousa, coordinador nacional de la caravana humanitaria junto al delegado provincial, Lehbib Ali Salem.
«Son vehículos y material procedentes del País Vasco y de Cantabria. También hay un todo terreno destinado a una escuela de educación especial, y una ambulancia con destino a una residencia en Argel, donde residen los saharauis enfermos que se curan en Argelia. Cada una de ellos están cargados de material para el centro y la residencia respectivamente», concreta Nousa.
Ambulancias, todo terrenos y autobuses esperan en el aparcamiento del campus universitario dispuestos a embarcar por el Puerto
Todos los vehículos, incluidos dos autobuses de doce metros de longitud procedentes de Cantabria, también se donan llenos de cargamento para cubrir necesidades de primer orden del pueblo saharaui. En esta ocasión, de modo excepcional, la UA actúa como sede de almacenaje del material que llega desde distintos puntos de las autonomías hasta que salgan hacia el note de África, previsiblemente este mismo mes.
«La ONG apenas dispone de recursos para pagar un parking y la Universidad ha hecho un enorme favor porque la caravana puede permanecer en el campus hasta que salga el barco», destaca la coordinadora provincial y a su vez presidenta de la Asociación de Elche, Ángela Carrillo.
Nousa concreta que este año, a consecuencia de la pandemia, se está produciendo un cierto retraso en la llegada del barco, pero que la total predisposición de la UA aporta también una tranquilidad absoluta al respecto.
El vicerrector recuerda que la Universidad «colabora habitualmente mediante distintas acciones con asociaciones de ayuda al pueblo saharaui y ésta es una más de ellas. Los refugiados saharauis -abunda- necesitan nuestro apoyo debido a las condiciones en las que viven, y ahora, en situación de pandemia, todavía con más urgencia», concluye.
