El tiempo pasa y el barrio Miguel Hernández sigue en el olvido. Ciudadanos no quiere que esto ocurra y ha puesto el tema sobre la mesa de las Cortes: acaba de presentar una proposición no de ley en la que insta al Consell a iniciar «de forma inminente» las obras de rehabilitación estructural, funcional, de accesibilidad y sostenibilidad» de los edificios de viviendas «para dar una solución al abandono sufrido durante décadas».
La resolución presentada por la portavoz adjunta de Ciudadanos, Mamen Peris Navarro, recuerda que Miguel Hernández «se ha convertido en un barrio degradado» en el que no se ha invertido nada desde los años 50 en los bloques de edificios para adecuar las 520 viviendas y desde la década de los 80 en las calles.
La proposición incide en que el barrio es, junto a los Palmerales de Elche, el que registra en la provincia «un mayor índice de ocupación ilegal», entre un 20% y un 25%, frente a la tasa media provincial del 16%.
Esta zona aparece «habitualmente entre las inversiones prometidas» por el Consell en los presupuestos de diferentes ejercicios, «pero no se ha realizado ninguna obra».
De hecho, el grupo naranja recuerda que en diciembre, la Conselleria de Vivienda sacó a licitación las obras de la primera fase del área de regeneración y renovación urbana prevista en el grupo de vivienda pública Miguel Hernández, consistente en la rehabilitación integral en Plaza María Yolanda Escrich Forniés, 5 y 6. Desde el mes de febrero de 2021, la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo cuenta con licencia municipal de obra mayor para iniciar estas obras.
«A pesar de ello, no se han comenzado todavía las obras en lo que ya es un gueto en plena ciudad de Alicante», sostiene Peris.
Por ello, la propuesta urge a iniciar la reforma de los edificios, así como las obras de reurbanización y accesibilidad, del área de regeneración y renovación urbana «para proveer de equipamientos y dotaciones públicas que garanticen una correcta calidad de vida urbana en la zona».
Los vecinos han denunciado en varias ocasiones la «desesperada» situación por la que atraviesa. «Son gente que vive allí toda la vida, se conocen, tienen miedo de que cada vez haya más ocupación ilegal, es una zona singular, muy cerca de centro, que se ha convertido en un gueto para la ciudad», lamenta Cs.
