El bipartito de PP y Ciudadanos destinará más de 560.000 euros en un año para externalizar la atracción de empresas tecnológicas a la ciudad de Alicante. Con ese objetivo, la Agencia Local de Desarrollo, que encabeza la concejala Mari Carmen de España, ha licitado sendos contratos para impulsar la estrategia «Alicante Futura» y la Oficina de Atracción de Inversiones.
El servicio de consultoría y asistencia para «Alicante Futura», la estrategia digital impulsada por el alcalde Barcala, cuenta con un presupuesto base de 273.005 euros y un plazo de ejecución de un año (que puede ser prorrogable otro ejercicio más). En el pliego de condiciones se incluyen exigencias como promover un «LAB de excelencia tecnológico, digital e innovador internacional», con talleres, acciones grupales y de dinamización, acompañamiento de nuevas empresas, identificación e impulso de comunidades y prescriptores. Como mínimo se debe realizar una treintena de actividades a lo largo del año.
Además, el bipartito del PP y Cs incluye en el pliego de condiciones la organización de un congreso anual de «Alicante Futura» con «actores, ‘stakeholders’ y profesionales de reconocido prestigio», para celebrar en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA) con «al menos» un millar de asistentes presenciales. Para la puesta de largo de la estrategia se estima un coste de unos 40.000 euros anuales.
Entre las exigencias que debe asumir la empresa que logre el contrato de consultoría para «Alicante Futura» también figura el impulso para la creación de «hubs» en sectores «estratégicos que sean claves para el futuro desarrollo de la ciudad». Además, el bipartito pretende avanzar en la «consolidación y proyección global de Alicante como capital mediterránea de la industria tecnológica, el emprendimiento digital y la nueva economía urbana».
Por otro lado, el segundo contrato que ha lanzado el bipartito busca la prestación del servicio de consultoría para la Oficina de Atracción de Inversiones del Ayuntamiento de Alicante. En este caso, el presupuesto base de licitación es de 287.980 euros, con un plazo de ejecución también de un año (igualmente ampliable a otro ejercicio más). Esta externalización de la gestión pretende captar empresas, y así queda negro sobre blanco entre las obligaciones de la adjudicataria: «El número de empresas o proyectos como mínimo a captar por la empresa adjudicataria y que sean beneficiarios de este programa será de veinte anuales. Al menos, cada proyecto o empresa supondrá la creación de diez puestos de trabajo con carácter indefinido en la ciudad o veinte con al menos un año de contrato». Y no sólo eso, sino que la adjudicataria del servicio deberá conseguir, del total de proyectos o empresas beneficiarias, la «instalación real, en el año de duración del contrato, de al menos el 50% de todas ellas». Es decir, de un mínimo de una decena. «En caso de no llegar a este objetivo (o al propuesto en su oferta si supone una mejora), «se aplicarán las penalidades previstas en la cláusula correspondiente de este pliego», que puede rondar un 5% del contrato (en torno a 15.000 euros).
Además, la adjudicataria también tiene que impulsar una red de «personalidades y de embajadores» de «Alicante Open For Business», que «ayuden a proyectar las acciones y el mensaje de diplomacia económica de la ciudad, abriendo mercado y opciones de negocio en sus áreas de actividad». Entre los mercados en los que el bipartito quiere fijar el objetivo se encuentran Madrid, Valencia y Bruselas, regiones ribereñas del Mediterráneo (con especial atención al Magreb y África), China y otros países relevantes de Europa o de América Latina.
