El nuevo general jefe del Mando de Operaciones Especiales (MOE), Francisco César García-Almenta Alonso, conoce muy bien el funcionamiento de esta unidad de élite del Ejército pues antes de su reciente nombramiento llegó a estar destinado en tres ocasiones en el cuartel de Rabasa en Alicante durante su ya larga carrera militar.
García-Almenta, de 54 años y nacido en Gijón, ingresó en la Academia General Militar en 1986, como componente de la XLVI Promoción, y obtuvo su despacho de teniente de infantería en julio de 1991.
Según fuentes de Defensa, ejerció el mando en sus empleos de teniente y capitán en unidades de La Legión, de Regulares y de Operaciones Especiales. Precisamente estuvo en el acuartelamiento de Rabasa en 1998 como capitán.
En noviembre de 2002 ascendió a comandante y se diplomó en Estado Mayor en 2003. Ocupó destinos de Estado Mayor en los cuarteles generales de la Fuerza de Maniobra (Valencia) y del Mando de Operaciones Especiales.
Tras su ascenso en julio de 2011 a teniente coronel asumió el mando del Grupo de Operaciones Especiales «Valencia III» en el MOE de Rabasa y posteriormente fue destinado al Estado Mayor del Ejército en Madrid.
En 2018 ascendió a coronel y desde entonces ha sido jefe del Tercio «Alejandro Farnesio» 4º de La Legión.
Francisco César García-Almenta ascendió el pasado 1 de agosto a general de brigada y desde entonces ha asumido la jefatura del Mando de Operaciones Especiales. La semana pasada fue recibido por el alcalde de Alicante y el próximo 7 de septiembre se celebrará el acto oficial de toma de posesión en Rabasa.
Durante su carrera militar ha participado en tres operaciones internacionales con diferentes organizaciones en Bosnia, Afganistán y Kuwait, esta última de la coalición internacional contra el Estado Islámico.
