Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Vicente Elvira Jefe de psiquiatría en el Hospital de Sant Joan

«El covid ha agravado las urgencias de jóvenes y niños por autolesiones»

Vicente Elvira, responsable de Psiquiatría en el Hospital de Sant Joan. | INFORMACIÓN

Es consciente de la necesidad de avanzar en el enfoque psicosocial y prevenir los problemas en adolescentes desde la Educación, la familia y los servicios sociales, con más personal y cooperación entre consellerias.

¿Cuáles son las patologías más comunes que atendéis en la Unidad de Hospitalización Psiquiátrica de Adultos?

Lo más frecuente suelen ser los cuadros afectivos de todos los tipos, cuadros psicóticos, el trastorno por uso de sustancias que es transversal a todos los trastornos y que generalmente los acompañan y los trastornos que se caracterizan por la inestabilidad emocional o los trastornos de personalidad. Y, por último, quizá los cuadros más orgánicos propios de psicogeriatría, cuadros de deterioro, de demencias incipientes, con alteraciones conductuales.

El covid ha originado una crisis social, sanitaria, económica y familiar. ¿Esta situación ha cambiado el perfil de la persona ingresada en esta unidad?

En cuanto al número de urgencias lo que sí que tendría que decir es que los últimos 4 años lo que estamos viviendo es un incremento de las urgencias que nosotros hemos atendido. En el 2020 han sido alrededor de 2.760 urgencias. Eso ha sido progresivo en estos 4 años. De la misma manera, no es que haya cambiado el tipo, lo que sí que vemos es que efectivamente vienen con muchísima gravedad, ha sido un incremento entre tres o cuatro veces: lo que son los intentos o la patología de la ideación suicida, de los gestos suicidas, las autolesiones,... Y lo que sí que hemos podido apreciar, que era una tendencia desde 2018, veíamos que iban incrementándose las urgencias en infanto-juvenil ahora en estos momentos, es una oleada de urgencias infanto-juvenil, por este tipo de patologías, autolesiones, amenazas autolíticas, ideas, intentos, gestos, inestabilidad emocional. De la misma forma que ha habido incremento de los trastornos de la conducta alimentaria y de su gravedad.

En la realidad, ¿el abordaje de la Salud Mental tiene un enfoque biopsicosocial?

Hasta ahora ha sido un deseo más que una realidad. Para ello son necesarios recursos sanitarios, sociales y coordinación entre agentes y creo que la Conselleria de Igualdad se nos estaba adelantando. Sin embargo, creo que por fin estamos en el camino. La Conselleria de Sanidad nos había manifestado reiteradamente su apuesta por la salud mental; hemos tenido refuerzos de personal muy necesarios con la pandemia que van a pasar a ser plazas estructurales y el gobierno valenciano ha puesto en marcha el plan Ariadna, encaminado a las necesidades de la juventud. Dentro de este plan, la labor del comisionado de salud mental, adscrito al gabinete de Presidencia y de la oficina autonómica de salud mental ha sido fundamental, porque han implementado unas iniciativas directas para los enfermos mentales, a nivel infanto-juvenil, y dentro de esto un plan de choque para esta oleada de patología infanto-juvenil que tenemos, apostando por cuatro dispositivos distintos: equipos de intervención domiciliaria que hagan de coordinación con los distintos agentes para casos concretos. Hospitales de día para este colectivo, que era una demanda crónica desde salud mental. A la red de salud mental de Alicante le corresponde la tarea de recibir y poner en marcha un equipo de intervención comunitaria para la patología infanto-juvenil, trabajando sobre casos específicos, coordinándose y asistiendo a los dispositivos de la Conselleria de Igualdad y de Educación. Y luego el tan deseado hospital de día que en principio será multidepartamental pero el plan Ariadna prevé 10 en toda la Comunidad Valenciana. Un trastorno mental grave sí se puede prevenir y tratar de forma psicosocial en un hospital de día. Hasta ahora nos hemos centrado poco más en lo biológico y ahora vemos la posibilidad de abordarlo de manera psicosocial contando con dispositivos y con todos los agentes implicados. El plan también contempla la idea de abrir pisos y evitar la necesidad de incrementar el número de camas de unidades de agudos de infanto-juvenil, a cargo de Sanidad y equipos de intervención para casos complejos, en conjunción con Educación. Además, el plan Ariadna contempla un programa de empleo para los enfermos mentales jóvenes, que les permita tener una autonomía y construir autoestima.

¿Cómo afecta el rechazo social a las personas con depresión?

Precisamente la falta de red social de apoyo es un factor de riesgo para la depresión y cualquier patología en salud mental. También es un factor de riesgo para el suicidio. En este caso las redes sociales pueden ser muy buenas o muy malas. Creo que estamos viviendo quizá lo malo. Porque nunca tanta información ha generado tanta desinformación y tantas opiniones tan distintas. Y desde luego la gente tendría que ser consciente de que las redes sociales son un medio de expresión, no son un medio de desahogo ni otro medio, sobre todo, cuando implican a otras personas a las que ni siquiera conoces y no eres consciente del daño que puedes hacer. Lo vemos en el bullying. Hemos aprendido a hacer bullying más fino a través de redes sociales y eso es mucho peor.

¿Cuáles son los signos de alarma en una persona con depresión o pensamientos suicidas?

El denominador común de la mayoría de los casos es el intenso sufrimiento ya sea por una enfermedad mental, una enfermedad física grave o dolorosa y las pérdidas (personales, familiares, económicas o sociales). Ante esto, debemos pensar que puede existir un riesgo en esa persona. En segundo lugar que la persona lo comunique. Cuando ya tenemos una persona con un cuadro depresivo, que está sufriendo y de repente, curiosamente, está bastante serena sin que haya solucionado absolutamente nada y observamos un cambio: cuando se producen esas despedidas, empieza a arreglar sus asuntos o repasa a sus amigos o contactos. En el caso de una familia, el cambio de conducta de ese chaval, que de repente se aísla, que lo vemos cabizbajo, que no disfruta de las cosas que estaba disfrutando hasta entonces. Es un signo y nosotros tenemos que preguntar. Por último, si la persona te lo dice o amenaza con llevar a cabo un suicidio. Es necesario preguntarles, aunque sea contrario a la creencia popular, no le vas a meter ninguna idea, al revés. Si las ideas las tiene puede ser que las exprese. Y gracias a eso, podamos llegar a ellos, porque hay un plan de prevención del suicidio, en el que se le da una cita preferente en 72 horas y luego están las urgencias.

¿En la actualidad, sigue siendo un estigma acudir a Salud Mental?

El estigma de la salud mental está en todos los niveles, también en el sanitario. Es fundamental normalizarlo. Al igual que con el suicidio, tenemos que hablar del suicidio, conocer qué es lo que podemos hacer frente a él y con la salud mental igual. Necesitamos saber que tienes un problema de salud mental, que vengas, que consultes, que preguntes y tenemos que estar adecuadamente dotados para poder dar respuesta a la persona con el problema salud mental.

Compartir el artículo

stats