Inteligencia artificial contra la turismofobia. La Asociación Provincial de Apartamentos Turisticos de la Provincia de Alicante (Aptur) ha dado un paso adelante para mejorar la gestión de su actividad y, además, prevenir las denuncias, algunas sin fundamento, que todos los años se reciben de los vecinos del entorno o del propio edificio donde se alquilan apartamentos. Englobados en una iniciativa que lidera la Federación Nacional de Viviendas Turística (Fevitur), las empresas de Alicante trabajan en la creación del sello de calidad “WeRespect”, que garantizará que los apartamentos cumplen a rajatabla los niveles de ruido exigidos por la normativa y, a la vez, certificará el origen de los ruidos “que no siempre llega de las fiestas de los turistas o los inquilinos”, subraya Miguel Sotillos, presidente de Aptur.
En estos momentos, la Costa Blanca encara la temporada alta turística con una oferta potencial de más de 58.000 apartamentos turísticos reglados (235.000 plazas), el 65% de la planta de la Comunidad Valenciana. Según datos de la patronal el alquiler de apartamentos turísticos puede crecer un 16% anual en los próximos años. Esta modalidad de alojamiento turístico está en auge y en alguna ciudades como Alicante supera en capacidad a la de los propios hoteles. Según la patronal este turismo es cada vez más rentable pues gasta el 65% de su presupuesto de vacaciones en el destino tras pagar el alquiler que supone el 35%.
Miguel Sotillos, presidente de Aptur, explica, en este sentido, que la “apuesta es mejorar la gestión el avance de las nuevas tecnologías nos permite contar con una red de sensores en los pisos que controlen en tiempo real el nivel de ruido. La información será trasladada a un centro automatizado y si el nivel vulnera la normativa un robot contactará con los inquilinos vía teléfono móvil para darles cuenta de que la incidencia. Si esta persiste y no se hace caso las empresas podrán enviar a una persona para advertir de la situación”.
Sotillos cree que “es un sistema que va a mejorar todo y, además, determinar el origen del ruido, pues no es lo mismo el ruido de una fiesta que el que pueda generar una conversación de dos personas en la terraza tomando un café”, subraya Sotillos. “Estamos hablando con datos de una prueba piloto se ha realizado en Barcelona sobre una planta de 5.000 apartamentos y ha funcionado”, señala el presidente de Aptur.
En cuanto a la valoración de cómo se presenta la temporada alta, Sotillo coincide con el resto de la patronal turística en que “hay incertidumbre y cautela porque la volatilidad es muy grandes. Venimos de la época de la pandemia marcada porque se cogían reservas sin pedir dinero por adelantado y esa práctica continúa, por lo que nos podemos encontrar con personas que han reservado cinco apartamentos en las mismas fechas y pueden cancelar con una semana de antelación. Con todo, confiamos en tener un buen verano”, subraya Sotillos.
A fecha de este miércoles, 1 de junio, en la provincia de Alicante hay 58.847 apartamentos turísicos registrados por Turisme, de los que 9.074 están en Benidorm y 4.166 en Alicante, que ha ganado 211 viviendas en un año y tiene ya 16.664 plazas, más del doble que la hoteleras (37 hoteles y 7.400 plazas).
La pandemia no ha solo tuvo un efecto demoledor para la ocupación de los hoteles de la Costa Blanca sino que también arrastró a la planta de las viviendas turísticas de alquiler en el mercado, con una caída 35% a lo largo 2021, según revela un informe hecho público por el Instituto Nacional de Estadística. La falta de demanda, de rentabilidad y el miedo al contagio explican, según los expertos, que muchos propietarios de viviendas turísticas hayan retirado del mercado este año un total de 17.813 apartamentos, bungalows y chalets, del total de 55.00 registrados por Turismo el año pasado.Las plataformas que comercializan el alquiler turístico gestionan una oferta de 33.776 viviendas en la provincia de Alicante. Los mayores descensos en la oferta, que no en la planta, se han producido en Alicante, Torrevieja, Xàbia y Calp, en un listado de los municipios con más de mil viviendas censadas. Por contra, en Benidorm la oferta ha crecido un 3,3%.
Por otro lado, el descenso medio de los alquileres en el mes punta del pasado verano, agosto, fue del 6%. En estos momentos, los cierres de edificios de apartamentos se concentran en Benidorm, Calp, El Campello, Torrevieja y Finestrat, estos explotados de forma empresarial. A ellos hay que sumar el que muchos propietarios también han decidido vender, en concreto, según la patronal, toda la bolsa de inversores que llegaron al sector hace tres años.
