Afectados por la burocracia digital reclaman atención presencial en administraciones públicas y bancos

Nace una plataforma para reivindicar un mejor trato al ciudadano y especialmente a los mayores a la hora de hacer trámites oficiales y para luchar contra la brecha digital

Afectados por la burocracia digital reclaman atención presencial en administraciones públicas y bancos

Pilar Cortés

J. Hernández

J. Hernández

Hasta para dar de alta el nuevo Grupo de Afectados por la Burocracia Digital, sus promotores se han encontrado con trabas. Para poder inscribir la plataforma en el registro de asociaciones de la Generalitat les piden la firma electrónica porque de lo contrario no tienen acceso a la carpeta ciudadana, "demasiada burocracia, no lo ponen fácil", afirma José Luis Gómez-Hurtado Chacón, portavoz del colectivo, que nace para reivindicar un mejor trato a los mayores a la hora de hacer trámites oficiales y para luchar contra la brecha digital.

La plataforma canaliza los centenares de quejas, sobre todo de personas mayores y jubilados, por el trato a la hora de hacer trámites oficiales y contra la teleburocracia. Trabas como la cita previa. Hasta ahora se han inscrito unas cuarenta personas que principalmente tienen dos frente abiertos: los bancos y la barrera que para los mayores son los cajeros automáticos; y las administraciones con la imposición de la cita previa para hacer cualquier trámite, sobre todo en las oficinas de la Seguridad Social cuando los mayores necesitan tramitar su pensión, con demoras de hasta diez meses.

La Seguridad Social lleva tres años sin atender en ventanilla. La obligación de hacer todos los trámites de la Tesorería de forma telemática y los del INSS con cita previa está aumentando la brecha digital y se convierten en un muro. Hay ciudadanos que han tenido que pagar a un gestor por la urgencia de la tramitación.

El modelo de cita previa obligatoria que administraciones públicas, bancos y otras instituciones impusieron por las restricciones a la presencia física y por la reducción de la atención presencial a que obligó la pandemia llegó para quedarse, pero se ha convertido en un muro contra el que se estrellan en muchos casos los ciudadanos.

El colectivo reivindica más formación en internet para los mayores

El colectivo reivindica más formación en internet para los mayores / Pilar Cortés

El Síndic de Greuges ha registrado un importante incremento de las quejas por las dificultades para acceder a las administraciones locales y alerta de que muchas de ellas utilizan la cita previa como un sistema para organizarse mejor en detrimento de la atención a quienes se deben, viendo la población limitadas sus posibilidades de relacionarse con los ayuntamientos pese a ser los más cercanos; e incluso a recursos como la Salud Mental y a los Servicios Sociales.

La institución considera que en ocasiones imponen la relación electrónica sin justificación. Por su parte, el Defensor del Pueblo ha abierto dos actuaciones de oficio para conocer qué previsiones maneja la Administración para normalizar el sistema de cita previa y recuperar los niveles de atención presencial previos a la pandemia en las oficinas de la Seguridad Social y del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

Además de Gómez-Hurtado, forman parte del Grupo de Afectados por la Burocracia Digital Francisco Llinares, Francisco Ortega y Manel Arjones, entre otros, quienes quieren reunirse con el Síndic de Greuges, Ángel Luna y la consellera de Innovación, Josefina Bueno, para transmitirles su malestar y pedirles acciones contra la brecha digital. Así como con la vicepresidenta del Consell, Aitana Mas.

"El problema con la cita previa es generalizado", coinciden. Uno de ellos explica que coincidió con una mujer que tenía un puesto en el mercado de Babel que tuvo que cerrar en una anterior crisis económica y solicitó una ayuda de 200 euros a la Generalitat. "Le exigían todo el trámite burocrático online y no tiene ordenador". Asimismo, apuntan que llamar a una centralita de cualquier administración es toda una aventura "y cuesta un montón que te den la cita previa. Tienes que llamar, que te atiendan, y cuando lo logras te dicen que llames a otro sitio o por internet. Ponen muchas pegas".

Ayuntamientos

También exponen que algunos ayuntamientos están prescindiendo de cursos de formación en internet y contra la brecha digital que demandan personas mayores que tienen habilidades. Francisco Ortega, que sí adquirió esta formación, afirma que en ocasiones ha tenido que ayudar a personas de edad a sacar dinero del cajero.

Por su parte, Arjones alerta de las colas antes bancos y algunas administraciones de personas con bastones y sin sitio para sentarse, y al sol en verano, porque son pocos, explican, los que destinan a una persona a su atención. Por su parte, Llinares insisten en la falta de atención en la mayoría de entidades bancarias, "hay que pedir cita y el problema es cuando mandan a los jubilados a sacar al cajero cantidades por debajo de 200 euros".

Por este motivo, critican que el Banco de España permita un funcionamiento deshumanizado, opuesto al que se prestaba antes, "que era una cosa casi familiar. La mayoría de entidades no dan una atención personal, se ha perdido ese trato personal. Reducen plantillas y te dicen: vuelva usted mañana. Se está deshumanizando todo a marchas forzadas". En este sentido, echan de menos que se diera un periodo de adaptación a la nueva burocracia digital como se hizo en su momento con el cambio de la peseta al euro.

Asimismo, creen que meses después de que se hiciera popular el ciudadano Carlos San Juan, impulsor de 'Soy mayor, no idiota', algunos compromisos de los bancos no se ha llevado a cabo.

Este grupo, que se ha integrado en Unir Alicante, ha celebrado dos charlas debate, la primera en el Instituto Figueras Pacheco Clarisa Feijoo, doctora de la UA en bienestar social y desigualdades; y la segunda en la Sede Universitaria con Natalia Papí, directora de la cátedra de brecha digital generacional de la UA.