Nadadores de Alicante ya advirtieron de vertidos en el Cabo de la Huerta hace dos años

Miembros de Alimar llevan desde 2022 señalando al Ayuntamiento y al Seprona acumulaciones de toallitas y plásticos en el emisario submarino situado bajo el faro

El alcalde atribuye al viento la presencia de basura en el mar y Aguas de Alicante mantiene que no se han producido escapes

Acumulación de toallitas y restos plásticos en una junta del emisario submarino.

Acumulación de toallitas y restos plásticos en una junta del emisario submarino. / INFORMACIÓN

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

El viento. Ese es, para el alcalde de Alicante, Luis Barcala, el culpable de las acumulaciones de toallitas y demás residuos que se han producido en la costa del Cabo de la Huerta en los últimos días. Según el dirigente popular, Aguas de Alicante ha confirmado que no se han producido vertidos irregulares, por lo que atribuye el incremento de la suciedad a "rachas de viento muy fuertes", producidas durante los últimos días de la Semana Santa.

"No ha habido ningún fenómeno que haya provocado que los aliviaderos hayan echado agua al mar", ha asegurado Barcala este mismo viernes. Sobre la denuncia de varios nadadores habituales de la zona publicada por INFORMACIÓN, donde aseguraban haber sido testigos de vertidos de restos fecales, el alcalde rechaza entrar al debate: "Yo no voy a cuestionar a alguien que no sé ni quién es, que dice que está nadando y se encuentra toallitas".

Sin embargo, la situación en el Cabo de la Huerta no es novedad para quienes disfrutan habitualmente del baño frente al faro. Miembros de Alianza Marítima de Alicante (Alimar), una asociación en defensa del litoral de la ciudad, ya denunciaron hace varios años la situación de daño ecológico en el fondo marino en esa zona.

De hecho, pusieron el problema en conocimiento tanto del Ayuntamiento de Alicante como del Seprona. En varios escritos presentados durante los años 2022 y 2023 advirtieron de que, gracias a diversas prácticas deportivas como la natación y el buceo, "se puede observar el impacto antropogénico que genera la tubería que descansa sobre la pradera de posidonia oceánica". El problema, según destacaron entonces, radica en que "ciertas tuberías no encajan" por lo que "dejan salir gran cantidad de plásticos" como toallitas, bolsas o compresas, "afectando a la fauna y flora del ecosistema".

Una situación que se agrava con episodios de lluvia como los del pasado domingo y que "puede afectar a la calidad de la costa y tener efectos negativos en el turismo". Por lo que desde Alimar solicitaron "la reparación lo antes posible de los tubos del aliviadero" así como "tomar las medidas oportunas que permitan la retención de plásticos", como pudiera ser la instalación de mallas de diferente diámetro.

Estudio de las aguas

En el Ayuntamiento de Alicante, Compromís y Esquerra Unida - Podemos no quieren que la denuncia vecinal de la pasada semana quede en nada. Por ello, la concejala valencianista Sara Llobell y el portavoz de EU, Manolo Copé, han anunciado que plantearán en el consejo de Aguas de Alicante la elaboración de un informe sobre el estado de la playa en cuestión.

"Nos preocupa que este incidente afecte a la calidad del agua, tanto por el entorno natural y medioambiental como para garantizar la seguridad del baño", han señalado ambos miembros de la Corporación municipal.