Crevillent, su sierra, vuelve a la palestra científica gracias al trabajo y al ímpetu surgido de la exitosa exposición en torno al reconocido geólogo Daniel Jiménez de Cisneros. Una muestra sobre este investigador, comisariada por la técnica de Cultura municipal Ana Satorre y el arqueólogo Daniel Belmonte, patrocinada por el Ayuntamiento de Crevillent, y visitada por más de 6.000 personas, conseguía dar el pistoletazo de salida a una serie de actuaciones encaminadas a fomentar el valor del enclave natural crevillentino.
En este sentido, la Sierra de Crevillent estará presente en la XXIV Bienal de la Real Sociedad Española de Historia Natural que se celebrará en València el próximo mes de septiembre. Bajo el título «La huella humana en la Naturaleza», esta bienal coincide con el 150 aniversario de la creación de la Real Sociedad Española de Historia Natural. Es, por tanto, una ocasión especial en la que, en un foro de primer nivel, distintos especialistas ofrecerán los resultados de sus investigaciones y proyectos en diferentes campos, relacionados de una u otra forma con el eje temático principal, así como con otros ámbitos del conocimiento.
Organizada por la Universitat de València a través de su Museo de Historia Natural y del Jardí Botànic, así como por la propia Real Sociedad Española de Historia Natural, las sesiones científicas se celebrarán los días 9 y 10 de septiembre. A dichas sesiones concurrirán trabajos de diferentes equipos de investigación y de diferentes puntos de la geografía española, tras pasar el correspondiente proceso de selección y supervisión por parte de revisores anónimos expertos en cada uno de los ámbitos de conocimiento, para asegurar la calidad científica del evento.
Este es el caso de dos trabajos presentados desde Crevillent, que ya han sido aceptados por el comité organizador presidido por la directora del Museo de Historia Natural de la Universidad de Valencia, Anna García Forner. El primero de ellos lo firma un equipo pluridisciplinar, integrado por la investigadora vinculada al CSIC, María Ángeles García del Cura; el ex rector de la Universidad de Alicante y catedrático de Petrología y Geoquímica de la misma universidad, Salvador Ordóñez; el arqueólogo crevillentino Daniel Belmonte, así como la técnica de Cultura del Ayuntamiento de Crevillent, Ana Satorre, y el doctor en Geoarqueología F. Javier Molina. El trabajo aborda una peculiar formación geológica del Mioceno de la sierra de Crevillent, denominada técnicamente como «cuerpos concrecionales dolomíticos en abanicos deltaicos». Estas formas esféricas, halladas en la sierra crevillentina, «se forman en un momento que podría datarse hace, aproximadamente, unos 12 millones de años, cuando el solar que hoy ocupa Crevillent estaría bañado por un mar somero en el que tendría lugar la formación de los elementos objeto de estudio», expone Belmonte. Se da la circunstancia de que «para ese mismo periodo, el Mioceno, aunque en un momento algo más reciente, Crevillent alberga un destacado yacimiento paleontológico a nivel internacional por su extraordinaria riqueza y diversidad y que fue objeto de la tesis doctoral del paleontólogo de la Universidad de Valencia Plinio Montoya», remarca Ana Satorre.
Divulgación del paraje
El segundo de los trabajos remitidos a la bienal reviste un carácter más divulgativo y tiene por objeto presentar la figura y el legado del naturalista Daniel Jiménez de Cisneros y su especial relación con la sierra de Crevillent. Firmado por Satorre y Belmonte, técnica de cultura municipal y arqueólogo respectivamente, el trabajo ofrece con cierto nivel de detalle las diferentes actividades, iniciativas y recursos desarrollados desde el Ayuntamiento de Crevillent en torno a la labor de Jiménez de Cisneros sobre la sierra homónima durante las primeras décadas del pasado siglo.
La apuesta que Crevillent está realizando para intentar rescatar la figura del destacado naturalista se está materializando a través de distintas líneas de trabajo impulsadas por Belmonte y Satorre, hasta ahora con el respaldo del Ayuntamiento «y con la inestimable colaboración de la familia Jiménez de Cisneros así como una larga nómina de investigadores e instituciones», destacan los investigadores.
Los trabajos presentados permiten volver a situar el nombre de Crevillent en un foro científico de primer nivel que, «en definitiva, redunda en el hecho de que esta población sea conocida y asociada al notable patrimonio cultural y geológico que atesora. Gracias a la custodia de una parte del legado de Jiménez de Cisneros que la familia está cediendo al consistorio crevillentino, hemos podido impulsar toda una serie de iniciativas que han tenido una muy buena acogida a nivel local y comarcal, si bien, las líneas de trabajo continúan, a fecha de hoy, desarrollándose gracias al apoyo de las concejalías de Cultura y Turismo», apunta Satorre.
Según anuncian los investigadores, durante los próximos meses se irán sucediendo nuevos hitos en relación con la figura de Jiménez de Cisneros, que están permitiendo que Crevillent sea la localidad de referencia en relación con el legado científico de tan ilustre naturalista.
