La Conselleria de Medio Ambiente estudia la propuesta del Ayuntamiento de Santa Pola para que se considere la excepcionalidad de la villa marinera en el actual decreto de la posidonia, que impedirá a los ayuntamientos recoger las algas durante todo el año. Desde el equipo de gobierno siguen insistiendo en que sería insostenible no poder retirar estas plantas acuáticas que recalan durante todos los meses.
Precisamente este jueves la alcaldesa, Loreto Serrano, se reunió en València con la secretaria autonómica de Medio Ambiente, Paula Tuzón, así como con la técnico municipal de playas, la ingeniera del Ayuntamiento y el edil del área, Ángel Piedecausa, para mostrar imágenes y el informe del Instituto de Ecología Litoral que muestra cómo prácticamente a diario llegan arribazones de posidonia y se pasa de playas limpias un viernes a otras repletas de algas el lunes, especialmente en riberas como las de Santiago Bernabéu o el Cabo.
Según los representantes municipales, hay predisposición de la Conselleria por, al menos, estudiar la excepcionalidad en este inminente decreto que va a aprobar el gobierno valenciano y que obligaría a las administraciones locales a blindar la posidonia durante varios meses al año.
Otra de las misiones de la reunión era tratar de buscar una solución a la gran cantidad de plantas acuáticas almacenadas, porque desde el ejecutivo local reconocen que ya no queda espacio para seguir haciendo el acopio junto al astillero de Vatasa.
Por ello le han planteado al gobierno autonómico varios espacios donde se podría derivar la posidonia. El Ayuntamiento ha transmitido durante las últimas semanas que han tenido que realizar un intenso trabajo durante la primavera para retirar cerca de un millar de camiones cargados con posidonia, por lo que esperan que la Generalitat se implique y les de soluciones.
El Ayuntamiento quiere soluciones y que se implique la Generalitat para que haya un equilibrio entre preservar el litoral y también la imagen turística del municipio. Hace unos días el edil de Playas, Ángel Piedecausa señalaba que será muy complicado cumplir el decreto y tener las playas en condiciones para los bañistas ya que de un día a otro la estampa puede cambiar sobremanera.
De igual forma, desde el ejecutivo local se apoyan en informes técnicos que señalan que Santa Pola es la localidad que más algas recoge de la Comunidad Valenciana, y podría deberse a la cercanía que hay con la reserva marina de Tabarca.
Así las cosas, a nivel local reclaman que se permita retirar los arribazones de las playas porque también se da el fenómeno de que al tratarse de playas semicerradas provocan que el oleaje no devuelva los restos de posidonia al mar, según Piedecausa. Alegan desde el Ayuntamiento que el sistema que aplica Santa Pola para retirar las algas no pone en peligro a la arena porque la inmensa mayoría se recupera después de amontonarse las algas.
